En esta foto de febrero de 2018, Larry Nassar se sienta en el tribunal escuchando declaraciones antes de ser sentenciado por la jueza Janice Cunningham por tres cargos de agresión sexual criminal en el Tribunal de Circuito del Condado de Eaton en Charlotte, Michigan. Crédito: Scott Olson/Getty Images/Archivo

(CNN) – El FBI continúa manejando mal las acusaciones de abuso sexual infantil en los años posteriores a la notoria negligencia de la agencia en la investigación sobre el médico de USA Gymnastics Larry Nassar, según una auditoría del inspector general del Departamento de Justicia publicada el jueves.

Debido a esos fallos, las denuncias de abusos sexuales contra menores quedaron sin abordar durante meses mientras los menores seguían siendo victimizados, según la auditoría.

En un ejemplo especialmente atroz, el FBI no dio seguimiento durante más de un año a una pista sobre abusos a menores cometidos por un delincuente sexual registrado. El FBI tampoco informó de la denuncia a las fuerzas de seguridad locales ni al agente de libertad condicional del agresor.

Mientras el FBI no actuó, dijo el inspector general, otro niño fue víctima de abusos durante 15 meses.

El FBI tampoco documentó ninguna medida adoptada por las fuerzas del orden para salvaguardar a un niño de 2 años que estaba siendo víctima de abusos sexuales mientras una investigación languidecía durante más de dos años, según la auditoría. El agente asignado a ese caso estaba haciendo malabarismos con demasiadas investigaciones, dijo el inspector general.

Un alto funcionario del FBI defendió a la agencia en una llamada con periodistas el jueves, diciendo que la “gran mayoría” de las cuestiones destacadas en la auditoría eran “cuestiones de cumplimiento”, lo que significa que “se tomaron medidas de investigación, se hicieron notificaciones, pero había documentación inadecuada o faltante en el expediente del caso”.

El funcionario añadió que “no refutamos que haya casos en los que deberían haberse tomado medidas de investigación”, y calificó esos fallos como “completamente inaceptables”.

La auditoría dio seguimiento a asuntos que el máximo organismo de control del departamento identificó como parte de su mordaz investigación sobre cómo el FBI investigó las acusaciones contra Nassar.

En la investigación de Nassar, que se abrió en 2018 y dio lugar a un informe final en 2021, el inspector general encontró que los altos funcionarios de la Oficina de Campo del FBI en Indianápolis no respondieron a las acusaciones de Nassar “con la mayor seriedad y urgencia que merecían y requerían”.

El organismo de control también descubrió que la oficina de campo cometió varios errores fundamentales cuando sí respondió a las acusaciones y no notificó las acusaciones a las autoridades estatales o locales ni tomó medidas para mitigar la amenaza continua que suponía Nassar.

Desde entonces, el FBI ha implementado varios cambios en torno a la forma de informar, investigar y documentar las acusaciones de abuso sexual infantil, dijo el inspector general.

A pesar de esos cambios, el inspector general descubrió que los empleados del FBI a menudo no informaban adecuadamente de las denuncias de abuso infantil a las fuerzas de seguridad locales o no informaban de la sospecha de abuso en curso a las autoridades locales en un plazo de 24 horas, como exige la política del FBI.

En casi la mitad de los 327 casos revisados para la auditoría, el inspector general dijo que no había pruebas de que los empleados del FBI cumplieran el requisito de informar de las denuncias a las fuerzas de seguridad locales. Sólo el 17% fueron denunciados con toda la documentación requerida.

En una audiencia celebrada en septiembre de 2021 en el Congreso sobre la investigación del caso Nassar, el director del FBI, Christopher Wray, había prometido que la agencia no permitiría que los fallos se repitieran.

“Lamento por lo que ustedes y sus familias han pasado. Siento que tantas personas diferentes les hayan defraudado, una y otra vez”, dijo Wray ante los legisladores en aquel momento. “Y lamento especialmente que hubiera personas en el FBI que tuvieron su propia oportunidad de detener a este monstruo allá por 2015 y fracasaron, y eso es inexcusable”, dijo. “Nunca debería haber ocurrido, y estamos haciendo todo lo que está en nuestras manos para asegurarnos de que no vuelva a ocurrir”.

El FBI dijo en un comunicado este jueves que “garantizar la seguridad y la protección de los menores no es sólo una prioridad para el FBI; es un deber solemne que estamos comprometidos a cumplir con los más altos estándares!, y que la agencia está “comprometida a mantener la confianza del público mediante la implementación de las mejoras necesarias” para garantizar que los niños estén protegidos.

El Departamento de Justicia llegó a un acuerdo de US$ 138,7 millones a principios de este año con más de 100 de las víctimas de Nassar por los fallos iniciales del FBI en la investigación del caso de agresión sexual.

Nassar fue condenado en un tribunal estatal a una pena de hasta 175 años de prisión por abusar sexualmente de jóvenes atletas bajo la apariencia de un tratamiento médico a lo largo de 20 años.