(CNN) –Las autoridades declarararon este sábado un día de luto en la ciudad ucraniana de Járkiv, mientras los equipos de rescate y emergencia concluyen sus operaciones tras un ataque con bombas ruso que mató a al menos a ocho civiles, incluida una niña en un parque infantil.
Al menos 97 personas resultaron heridas, incluidos 24 niños, cuando Moscú atacó la ciudad con cinco bombas aéreas guiadas el viernes, según las autoridades ucranianas, en uno de los ataques rusos con más impacto en la región durante el verano. Entre los muertos se encontraba Sofía, de 14 años, que estaba en un parque infantil, dijo el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky.
El sábado, otras dos personas murieron y al menos 10 resultaron heridas, incluidos dos niños, cuando las fuerzas rusas atacaron la aldea de Cherkaska Lozova, también en Járkiv.
“Estos horribles y cobardes ataques rusos apuntaron a hogares comunes y a un parque de la ciudad. Rusia tendrá que hacerse responsable de todas sus malas acciones”, dijo Zelensky, presionando nuevamente a los aliados occidentales para que aumenten su apoyo militar.
“Necesitamos decisiones, decisiones que pueden tomar nuestros socios, decisiones de aquellos países que tienen el poder para garantizar que tengamos la capacidad de destruir los aviones militares rusos en sus bases, donde la eliminación de estos terroristas y sus aviones será más efectiva”, dijo el viernes.
Las fuerzas rusas llevaron a cabo el “bombardeo masivo” de la ciudad utilizando aviones de combate Su-34 que fueron desplegados desde la región fronteriza de Belgorod, según el jefe de la oficina del fiscal regional de Járkiv, Oleksandr Filchakov.
Las bombas aéreas guiadas de 500 kilos fueron lanzadas desde territorio ruso y son muy difíciles de interceptar, según los funcionarios ucranianos.
Apuntar a los aviones que transportan esas bombas es la forma más efectiva de prevenir tales ataques, ha argumentado Zelensky, mientras continúa instando a los Estados Unidos y a los socios occidentales a levantar las restricciones sobre el uso de armas de largo alcance para golpear objetivos militares en el territorio ruso.
Las bombas aéreas guiadas impactaron la infraestructura civil en cuatro distritos de la ciudad durante el ataque de la tarde del viernes, dijo Filchakov, añadiendo que 82 edificios de apartamentos, 11 casas particulares, tres edificios administrativos, dos establecimientos educativos, 47 instalaciones comerciales, 57 automóviles, dos almacenes, 10 garajes y una instalación empresarial resultaron dañados.
“Se trata de una bomba con un módulo de control, lo que significa que el enemigo estaba apuntando específicamente a la infraestructura residencial”, dijo este sábado el jefe de la administración militar regional de Járkiv, Oleh Syniehubov.
En el ataque de este sábado, el ejército ruso utilizó una bomba guiada FAB-500, que dañó unas 20 casas, según informó la fiscalía regional. “Una mujer que se encontraba en el epicentro inmediato de la explosión murió, así como su vecina”, indicó.
Mientras tanto, las evacuaciones de civiles continúan en la región de Donetsk, donde las fuerzas rusas pretenden tomar el control de la ciudad estratégica de Pokrovsk. La ciudad sirve como un centro clave para el ejército ucraniano debido a su fácil acceso a Kostiantynivka, otro centro militar. Ucrania utiliza la carretera que conecta los dos para reabastecer las líneas del frente y evacuar a las víctimas.
En los últimos tres días, 86 niños han sido evacuados de Kostiantynivka y áreas cercanas junto con sus padres a medida que se intensifica el bombardeo ruso, dijeron el sábado funcionarios regionales. Había casi 2.130 niños viviendo en la comunidad antes de la evacuación obligatoria.
Los niños y sus padres están siendo sacados en vehículos blindados de los asentamientos ubicados a menos de 10 kilómetros (aproximadamente 6,2 millas) de la línea del frente, según la Policía Nacional de Ucrania.
“Ni siquiera pensamos en irnos. No queríamos dejar lo que tenemos. Nos vamos por los niños, para mantenerlos a salvo”, dijo una de las madres evacuadas.
Al menos una persona murió en Kostiantynivka y al menos 11 resultaron heridas durante la última semana, según la policía.
Ucrania ataca la región rusa de Belgorod
Mientras tanto, los ataques ucranianos al otro lado de la frontera con Rusia continuaron este sábado.
Al menos cinco personas murieron y más de 50 resultaron heridas en la región rusa de Belgorod en las últimas 24 horas, dijo el gobernador regional.
La mayoría de las víctimas se produjeron en la ciudad de Belgorod, donde tres personas murieron y 31 civiles, incluidos tres niños, resultaron heridos. Más de 20 personas permanecían hospitalizadas el sábado, dijo el gobernador Vyacheslav Gladkov.
La infraestructura civil en toda la región resultó dañada, dijo.
Los ataques ucranianos en la región rusa de Kursk también continuaron, dijo Moscú el sábado. Las fuerzas de Kyiv han logrado nuevos avances en su incursión en la región fronteriza, dijo el jefe del ejército de Ucrania el viernes.
Las tropas de Kyiv han avanzado hasta 2 kilómetros más en algunas áreas durante las últimas 24 horas, tomando el control de otros 5 kilómetros cuadrados del territorio, dijo el viernes el comandante superior de Ucrania, Oleksandr Syrskyi.
Además de las víctimas en Járkiv, los ataques rusos en territorio ucraniano han matado al menos a tres personas y herido a 16 en las últimas 24 horas, según las autoridades.
La Fuerza Aérea de Ucrania dijo el sábado que las fuerzas rusas habían atacado Ucrania durante la noche con un misil balístico Iskander-M lanzado desde la región de Voronezh, cuatro misiles antiaéreos guiados S-300 lanzados desde partes ocupadas de la región de Donetsk y 52 drones Shahed lanzados desde la región de Kursk.