(CNN) – Los jefes de la CIA de Estados Unidos y del servicio de inteligencia exterior del Reino Unido, conocido como MI6, destacaron la importancia de la colaboración de inteligencia entre sus países en una aparición pública conjunta sin precedentes este sábado en Londres.
El evento, un debate en el Financial Times Weekend Festival presidido por la editora del periódico Roula Khalaf, marca la primera vez que los dos hombres, Richard Moore del MI6 y el jefe de la CIA Bill Burns, aparecen juntos en un escenario público.
Los dos hombres hablaron de la importancia de la colaboración entre Estados Unidos y el Reino Unido, en particular ante la agresión rusa. Burns citó el período previo a la guerra en Ucrania, lanzada por el presidente de Rusia Vladimir Putin en febrero de 2022, como uno de los mejores ejemplos.
“Volviendo al otoño de 2021, los dos juntos, nuestros servicios juntos, pudimos proporcionar una advertencia creíble, temprana y precisa de la invasión que se avecinaba, lo que no fue poca cosa en ese momento, porque casi todos los demás servicios en todo el mundo, nuestros homólogos de inteligencia, pensaron que esto era simplemente un engaño por parte de Putin”, dijo el jefe de la CIA.
“Creo que una buena inteligencia permitió a nuestros líderes, a nuestros líderes políticos, movilizar una coalición muy fuerte para contrarrestar la agresión de Putin”, añadió.
Burns dijo que esto ayudó a los ucranianos a defenderse. También habló de un “enfoque novedoso” para desclasificar algunos secretos en ese período como una forma de negarle a Putin la oportunidad de vender narrativas falsas. Esto puso a Putin en la “posición poco habitual e incómoda de estar en el pie izquierdo”, dijo Burns.
Al hablar sobre la amenaza de China, Rusia, Irán y Corea del Norte, Moore dijo que había mucha “cooperación pragmática” entre estos países.
“Por supuesto, se puede ver, por desgracia, en el campo de batalla en Ucrania. Se puede ver a Corea del Norte, el armamento norcoreano. Se pueden ver los drones iraníes. Se puede ver el tipo de ayuda que han proporcionado los chinos a través de material de uso dual. Todo eso se puede ver en nuestro mundo”.
Además de esto, Burns dijo que todavía no ha habido ninguna “prueba directa” de que China proporcione armas y municiones a Rusia para su uso en Ucrania. Sin embargo, dijo: “Vemos muchas cosas que no se parecen a eso, como dijo Richard, en términos de artículos de uso dual, el tipo de cosas que han permitido a Putin en el transcurso de los últimos 18 meses aproximadamente reconstruir significativamente su base industrial de defensa y que plantean un peligro real”.
Dañando la narrativa del Kremlin
Hablando sobre la ofensiva sorpresa de Ucrania en la región fronteriza de Kursk con Rusia, Burns dijo que tales acontecimientos ayudan a contrarrestar la “actitud arrogante y presuntuosa” de Putin.
Según Burns, la postura de Putin respecto de la guerra en Ucrania ha sido que “sólo es cuestión de tiempo antes de que los ucranianos sean aplastados y todos sus partidarios en Occidente sean desgastados”, lo que le permitirá al presidente ruso dictar los términos para un acuerdo.
Acontecimientos como la ofensiva ucraniana en Kursk ayudan a “hacer mella” en esa narrativa y plantean preguntas entre la élite rusa sobre “hacia dónde se dirige todo esto”, dijo Burns. La ofensiva del mes pasado vio a las fuerzas ucranianas irrumpir en Kursk en una incursión transfronteriza que tomó por sorpresa incluso a los funcionarios estadounidenses.
Burns describió la ofensiva en Kursk como un “logro táctico significativo” que ha servido para levantar la moral ucraniana, así como para exponer algunas de las vulnerabilidades de la Rusia de Putin y su ejército. La efímera insurrección del año pasado llevada a cabo por el exjefe de Wagner Yevgeny Prigozhin también ayudó a hacer mella en esta narrativa, dijo Burns.
Sin embargo, el jefe de la CIA no ve que el control de Putin sobre el poder se esté debilitando. “Hay una cosa que hace muy bien: reprimir a la gente en su país”.
Esfuerzos para un alto el fuego en Gaza
Al hablar sobre las negociaciones para lograr un alto el fuego y un acuerdo sobre los rehenes en Gaza, Burns dijo que Estados Unidos está “trabajando muy duro” con los mediadores Egipto y Qatar para refinar el marco propuesto por Biden en mayo y ponerlo “en una propuesta lo suficientemente buena” para que tanto los líderes israelíes como los de Hamas vean el valor de avanzar con él.
Subrayó que, en su experiencia con las negociaciones en Medio Oriente, “la perfección nunca está sobre la mesa”, y añadió que no podía decir con certeza que “vamos a tener éxito”, ni cuán cerca podrían estar Estados Unidos y los mediadores de un acuerdo en este momento.
Hay mucho en juego para los palestinos y los israelíes, así como estratégicamente en la región, dijo Burns. Pero sobre todo, lo que está en juego es “en términos humanos”, dijo, señalando a los rehenes tomados por militantes liderados por Hamas que todavía están vivos y viven en “condiciones infernales”, así como a las “innumerables madres y padres en Gaza que están lidiando con sus propias pérdidas terribles” y el empeoramiento de la situación humanitaria en el enclave.
Biden anunció por primera vez el marco para un plan de paz entre Israel y Hamas el 31 de mayo, con el que dijo que Israel había estado de acuerdo. La propuesta de tres fases combinaba la liberación de rehenes con un “alto el fuego total y completo”. El plan preveía la retirada de las tropas de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) hacia el este de Gaza.
Desde entonces, ambas partes han señalado lo que consideran lagunas evidentes en el marco del acuerdo, y el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha insistido en que las fuerzas de Israel nunca abandonarán el tramo a lo largo de la frontera entre Egipto y Gaza conocido como el Corredor Philadelphi.
Los esfuerzos de liberación de rehenes adquirieron nueva urgencia a principios de este mes con el descubrimiento de los cuerpos de seis rehenes en un túnel debajo de la ciudad de Rafah, en el sur de Gaza, incluido el ciudadano israelí-estadounidense Hersh Goldberg-Polin.
La conversación con Moore y Burns fue precedida por un editorial escrito conjuntamente en el periódico Financial Times en el que enfatizaron que el orden mundial internacional estaba “bajo amenaza de una manera que no hemos visto desde la Guerra Fría”.
Esta es una historia en desarrollo y será actualizada.