(CNN) – La misión Polaris Dawn de SpaceX arrancó a primera hora de este martes, poniendo en órbita una tripulación de cuatro astronautas civiles. Y horas después ya han hecho historia: alcanzar la órbita más alta alrededor de la Tierra y superar un récord establecido durante los primeros días de la NASA.
La compañía confirmó que la nave SpaceX Crew Dragon que transportaba a la tripulación alcanzó su altitud máxima de 1.400,7 kilómetros a las 9:19 p.m. ET de este martes.
Esa distancia superó el récord establecido por la misión Gemini 11 de la NASA en 1966, que alcanzó 1.373 kilómetros durante su viaje alrededor de la Tierra.
Las misiones Apolo de la NASA viajaron más lejos pero no entraron en una órbita tradicional alrededor de la Tierra. Su destino era la Luna, que se encuentra aproximadamente a 402,336 kilómetros de nuestro planeta. La misión Polaris Dawn es también la que más lejos ha llegado un ser humano desde la última misión Apolo en 1972, y la que más lejos ha llegado una mujer al espacio.
Un paseo espacial sin precedentes
Puede que SpaceX y la tripulación de Polaris Dawn estén celebrando su hito, pero los esfuerzos más arriesgados aún están por llegar en esta misión de cinco días, que está diseñada para superar los límites de los viajes espaciales comerciales y ayudar a probar tecnologías que SpaceX podría utilizar en excursiones más profundas en el cosmos.
Tan pronto como este jueves por la mañana, el equipo de Polaris Dawn -que incluye al CEO de Shift4 Payments, Jared Isaacman, financiador de la misión; su amigo íntimo y antiguo piloto de las Fuerzas Aéreas estadounidenses Scott “Kidd” Poteet; y las ingenieras de SpaceX Anna Menon y Sarah Gillis- intentará realizar el primer paseo espacial comercial.
Se espera que este acontecimiento pionero, que comenzará a principios del tercer día de la tripulación en el espacio, tenga lugar mientras la tripulación orbita a unos 700 kilómetros sobre la Tierra.
Isaacman, Menon, Poteet y Gillis se expondrán al vacío del espacio cuando se despresurice su cápsula Crew Dragon y se abra una escotilla circular. Y dos miembros de la tripulación, Gillis e Isaacman, saldrán de la nave espacial durante las aproximadamente dos horas que el vehículo permanecerá con la escotilla abierta en la vasta extensión.
La tripulación estará protegida del implacable vacío únicamente por los nuevos trajes de actividad extravehicular (EVA, por sus siglas en inglés) de SpaceX. Los trajes espaciales se diseñaron y desarrollaron en dos años y medio, un tiempo increíblemente rápido para los estándares aeroespaciales.
En comparación, la NASA lleva más de una década intentando sustituir los viejos trajes espaciales de la Estación Espacial Internacional. Esos trajes se diseñaron hace 40 años.
La cápsula Crew Dragon ya está sometiendo a la tripulación a un largo proceso de “preinspiración”, que prepara el cuerpo de los astronautas para el paseo espacial. Funciona purgando lentamente el nitrógeno de la sangre de los tripulantes para que el gas no burbujee en su torrente sanguíneo a medida que cambia la presión en el interior del vehículo.
El proceso de preinspiración pretende evitar el síndrome de descompresión, la misma enfermedad peligrosa y potencialmente mortal a la que pueden enfrentarse los submarinistas si intentan salir a la superficie demasiado rápido.
El protocolo de preinspiración al que se somete la tripulación del Polaris Dawn es totalmente distinto del que se lleva a cabo en la Estación Espacial Internacional. La estación espacial dispone de esclusas especiales en las que los astronautas pueden someterse a un rápido proceso de preinspiración antes de iniciar sus caminatas espaciales. Solo dura un par de horas.
La rutina de preinspiración de la tripulación de Polaris Dawn, sin embargo, durará unas 45 horas, explicó Gillis a CNN, ya que el contenido de oxígeno en la cabina aumenta lentamente mientras la presión disminuye.
“Lo que es realmente genial de este perfil (de preinspiración) es que, en muchos aspectos, es mucho menos arriesgado que lo que es habitual en la estación espacial”, dijo Gillis a CNN. “Es como abrir una lata de refresco - y quieres abrir la lata (y que) ninguna de las burbujas salga porque la presión fuera de la lata es igual a la que hay dentro”.
Al reducir la presión en el interior de Crew Dragon, explicó Gillis, y ponerse los trajes espaciales justo cuando la presión ambiental es igual a la presión del traje, los tripulantes pueden mitigar mejor cualquier riesgo de burbujas no deseadas.
El mayor reto llega una vez concluida la caminata espacial: cerrar la escotilla a bordo de la cápsula Crew Dragon, conseguir que la presurización vuelva a la normalidad y regresar a la Tierra de forma segura.
“Deberían estar nervioso por (esta misión)”, dijo el exastronauta de la NASA y asesor de SpaceX Garrett Reisman a CNN en agosto. “Siempre que se intenta algo por primera vez hay riesgos significativos. Me sentiré mucho mejor cuando estén de vuelta dentro con la escotilla cerrada y atrancada”.