Londres (Reuters) –– Un médico británico se declaró culpable este lunes de un complot audaz pero fallido para matar a la pareja de su madre con una vacuna falsa contra el covid-19, que implicó falsificar documentos médicos y disfrazarse para inyectarle veneno a su víctima.
Thomas Kwan, de 53 años, se hizo pasar por enfermero e incluso tomó la presión arterial de su propia madre antes de administrarle veneno a su pareja, Patrick O’Hara, en Newcastle, al norte de Inglaterra.
O’Hara sobrevivió, pero sufrió una fascitis necrosante, una infección bacteriana carnívora potencialmente mortal, después de recibir la inyección, dijeron los fiscales.
Kwan, un médico de familia en Sunderland, se declaró culpable de tentativa de homicidio este lunes, poco después de que comenzara su juicio en el Tribunal de la Corona de Newcastle la semana pasada, dijo el personal del tribunal.
Previamente había admitido un cargo por administrar una sustancia nociva.
El fiscal Peter Makepeace les había dicho a los jurados el primer día del juicio, que comenzó el jueves: “A veces, ocasionalmente quizás, la verdad realmente es más extraña que la ficción”.
Dijo que Kwan estaba preocupado por el testamento de su madre, que establecía que su casa sería heredada por O’Hara si él aún estaba vivo cuando su madre muriera.
“El señor Kwan utilizó su conocimiento enciclopédico y su investigación sobre venenos para llevar a cabo su plan”, dijo Makepeace.
“Ese plan era disfrazarse de enfermero comunitario, acudir a la dirección del señor O’Hara, la casa que compartía con la madre del acusado, e inyectarle un veneno peligroso con el pretexto de administrarle una inyección de refuerzo contra el covid-19”.
Kwan se registró en un hotel con un nombre falso, utilizó matrículas falsas en su coche y se disfrazó con una peluca para llevar a cabo el plan, añadió Makepeace.