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Protección de la privacidad en Airbnb sigue causando controversia
02:21 - Fuente: CNN

Roma (CNN) – El antiguo Coliseo de Roma ha sido testigo de algunas batallas históricas, con multitudes vestidas con togas que una vez llenaron el gigantesco lugar para ver a los gladiadores enfrentarse a oponentes, incluidos leones y babuinos.

Pero a pesar del paso del tiempo, aparentemente los días de lucha no han terminado.

El lugar de 2.000 años de antigüedad es ahora el escenario de un nuevo enfrentamiento épico, uno que es emblemático de la lucha actual de Italia por equilibrar su creciente industria turística posterior al covid con las necesidades de los locales que se sienten asediados mientras sus pueblos y ciudades se convierten en atracciones turísticos inhabitables.

De un lado de la arena se encuentran el gigante del alquiler vacacional Airbnb y el Parque Arqueológico del Coliseo, que supervisa la estructura en ruinas, una de las atracciones más visitadas de Roma.

Las dos organizaciones han firmado un acuerdo por valor de US$ 1,5 millones para ofrecer a 16 turistas la oportunidad de “dar rienda suelta al gladiador que llevan dentro” reservando una experiencia gratuita en el Coliseo, como parte de la película de Paramount “Gladiator II”, dirigida por Ridley Scott, que acaba de estrenarse.

“Sentirás la adrenalina, la arena entre los dedos y el peso de tu armadura. Oirás los ecos de gladiadores pasados en las catacumbas del Coliseo y el inconfundible tintineo del acero. Verás el reflejo de la luna en la piedra travertina a través del sudor que te cae por la cara. Te convertirás en un gladiador”, promete el anuncio de Airbnb.

En el otro bando está el concejal de Cultura de Roma, Massimiliano Smeriglio. Pidió a la plataforma de alquiler que retire el plan pero que deje el dinero, alegando que la promoción es un insulto a la talla histórica del Coliseo.

“La cuestión no es la relación público-privada o el deseo de las grandes marcas de apoyar la protección y conservación”, dijo Smeriglio en un comunicado compartido con CNN. “Sino de evitar un uso degradante de nuestro patrimonio histórico-artístico, especialmente cuando se trata de un monumento único en el mundo como el Coliseo”.

Airbnb ofrece a sus clientes la oportunidad de participar en batallas de gladiadores en el Coliseo de Roma. (Foto: Antonio Masiello/Getty Images).

“Lugar de bromas”

Como parte de la promoción de Airbnb, anunciada esta semana, los aspirantes a gladiadores pueden inscribirse en la plataforma de alquiler a corto plazo a partir del 27 de noviembre para tener la oportunidad de ser uno de los 16 elegidos que califiquen para participar en una “batalla simulada” entre ellos con vestimenta completa de gladiador para mayo de 2025. La experiencia es gratuita, pero los ganadores tendrán que organizar su transporte y alojamiento en la “ciudad eterna”.

Smeriglio no está solo en su oposición. La presidenta de la Comisión de Cultura de Roma, Erica Battaglia, advirtió que el lugar patrimonial de la UNESCO no puede convertirse en un parque de atracciones.

“Por lo que representa, el Coliseo es un sitio de patrimonio mundial y se debe ir en la dirección de protegerlo, pero también de hacerlo accesible para todos y evitar que se convierta en un lugar de bromas para unos pocos”, afirmó en un comunicado este viernes.

La ciudad de Roma, que recibirá a millones de visitantes para el Año Santo Jubileo del Vaticano 2025, declarado por el Vaticano, ha estado luchando por encontrar el equilibrio entre gestionar sus ofertas culturales y convertir a la ciudad en lo que algunos denuncian como un parque de atracciones.

La Fontana di Trevi, que está experimentando una importante renovación, pronto comenzará a limitar el acceso de turistas y puede que pronto comience a vender boletos a los visitantes que deseen hacer fila para lanzar sus monedas en sus aguas para la suerte.

“No somos Disneyland”

Enzo Foschi, político del Partido Democrático de centroizquierda que actualmente controla Roma, criticó al Parque Arqueológico del Coliseo, dependiente del Ministerio de Cultura nacional, por aceptar el acuerdo con Airbnb en un momento en que muchas ciudades italianas luchan contra el turismo excesivo.

“Un truco publicitario de Airbnb que, después de haber tomado posesión efectiva del centro histórico, distorsionándolo por completo y convirtiéndolo en un gran parque turístico, ahora quiere ridiculizar el Coliseo”, dijo el viernes. “No estamos en Disneyland, estamos en Roma. De vez en cuando alguien parece olvidarlo”.

Por su parte, el Parque Arqueológico del Coliseo se ha mantenido firme, insistiendo en que el evento tendrá lugar fuera del horario de apertura del Coliseo y no interferirá en el acceso al recinto.

Su dirección dijo en un comunicado que el plan es en realidad “mejorar el patrimonio histórico y cultural del anfiteatro a través de actividades de inmersión en el pleno respeto del monumento, basado en la investigación histórica rigurosa”. Airbnb, al ser preguntada, dirigió cualquier pregunta a las autoridades de Roma.

“La colaboración tiene como objetivo combinar la conservación, la educación y la innovación para acercar a un público cada vez más amplio a la riqueza cultural del anfiteatro”, dice el comunicado. Los US$ 1,5 millones se destinarán a la conservación y restauración del lugar.

La polémica colaboración cuenta también con el apoyo del partido de la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, Hermanos de Italia. Federico Mollicone, miembro de este partido que preside la Comisión de Cultura de la Cámara Baja, aplaudió la innovadora idea.

“El parque arqueológico del Coliseo hizo bien en firmar un memorando de entendimiento con las asociaciones de recreación histórica garantizando también a los turistas un espectáculo de gladiadores de alta calidad científica coordinado por funcionarios del ministerio de Cultura”, señaló el viernes en respuesta a las críticas de Smeriglio.

“Reiteramos nuestro absoluto favor al acuerdo entre lo público y lo privado en la cultura, a través de asociaciones o patrocinios, siempre que apoyen iniciativas que sean de valor científico y cultural aprobadas por el Ministerio de Cultura”.