(EFE) – El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, anunció este jueves un tercer paquete de ayudas para los afectados por el temporal que afectó a Valencia, por valor de 2.274 millones de euros (US$ 2.393 millones), que se aprobará el jueves en un Consejo de Ministros extraordinario.
El pasado 29 de octubre, un fuerte temporal provocó graves inundaciones en la provincia de Valencia, que causó más de 200 muertos y muy cuantiosos daños en infraestructuras, industrias, negocios y viviendas particulares, y que también afectó, aunque en menor medida, a otras regiones de España.
Este nuevo paquete de ayudas completa el plan de respuesta a la catástrofe que ideó el Gobierno en tres fases, del que hasta ahora se han movilizado en créditos e inversiones 14.373 millones de euros, con lo que el monto total se eleva a 16.600 millones.
Sánchez, que compareció este miércoles en el Congreso para dar cuenta de la gestión del Ejecutivo en esta catástrofe, destacó, entre las 60 medidas que se aprobarán mañana, un plan para la renovación del parque automovilístico dañado que permitirá a los ciudadanos que necesiten comprar un vehículo recibir una ayuda directa de hasta 10.000 euros.
También activará una nueva línea de 1.200 millones para que los autónomos y empresas industriales y turísticas puedan reparar sus instalaciones, equipos y stocks de productos; y puedan realizar nuevas inversiones.
Asimismo, el tercer paquete incluirá una línea de 240 millones de euros para la reactivación del comercio local y una línea de préstamos bonificados para aquellas pymes afectadas que deseen adquirir tecnología y maquinaria de última generación, por un total de 300 millones de euros.
Las inundaciones destrozaron cientos de negocios, en una de las zonas de España con más tejido empresarial, sobre todo pymes.
El presidente del Gobierno apuntó que, hasta ahora, se recibieron 273.600 solicitudes de ayudas y se realizaron ya pagos por un valor superior a 60 millones de euros.
Afirmó que espera que en diciembre “se agilicen los pagos” y se comprometió a que llegue a los damnificados “hasta el último euro” anunciado.
Casi un mes después de las inundaciones, cuando todavía hay muchos sótanos y garajes con agua y barro, tanto vecinos como empresas insisten en la necesidad de que las ayudas lleguen y sea de manera rápida porque son fundamentales para su supervivencia.