(CNN) –– Stellantis, fabricante de Chrysler, Jeep, Fiat y Peugeot, entre otras marcas, anunció este domingo que el CEO Carlos Tavares renunció tanto por diferencias con la junta directiva como por las decepcionantes ventas y los pedidos de su salida.
La decisión se produce tras una fuerte caída de las ventas de Stellantis, un exceso de vehículos sin vender en las concesionarias, despidos en varias de sus plantas y pedidos de su salida no solo del sindicato United Auto Workers, que representa a sus trabajadores estadounidenses, sino también de un consejo de sus concesionarios estadounidenses.
Tavares y el consejo directivo de Stellantis tenían “opiniones diferentes”, lo que llevó a su renuncia, dijo el director independiente senior de Stellantis, Henri de Castries, en el comunicado.
Tavares, de 66 años, es un empresario portugués que desempeñó un papel fundamental en el acuerdo que fusionó el grupo automovilístico francés PSA, fabricante de Peugeot, y el fabricante de automóviles europeo-estadounidense Fiat-Chrysler, para formar la nueva Stellantis. Había sido presidente del grupo PSA antes de ese acuerdo, que se cerró en enero de 2021. A principios de este año, se anunció que Tavares se jubilaría al final de su contrato, a principios de 2026.
“El proceso para designar al nuevo Director Ejecutivo permanente está en marcha, gestionado por un Comité Especial del Directorio, y concluirá en el primer semestre de 2025. Hasta entonces, se establecerá un nuevo Comité Ejecutivo Interino, presidido por John Elkann”, informó la compañía en un comunicado de prensa.
La compañía dijo en un correo electrónico a CNN que no tiene más comentarios.
La decisión de Tavares de renunciar se produjo en medio de altos precios de Jeep y una base de consumidores decepcionada.
En octubre, el fabricante de automóviles redujo su pronóstico de ganancias para 2024 debido a la disminución de las ganancias y las ventas. El domingo dijo que mantiene su pronóstico de ganancias reducidas para el año.