Harvey Weinstein, en el centro, comparece ante un tribunal penal en Nueva York, el miércoles 18 de septiembre de 2024. Crédito: Seth Wenig/Piscina/AP.

(AP) – Harvey Weinstein fue hospitalizado este lunes tras un “análisis de sangre alarmante”, dijo su abogado, menos de una semana después de que el magnate del cine caído en desgracia presentara una demanda legal alegando atención médica deficiente en el notorio complejo carcelario de la ciudad de Nueva York.

Weinstein, de 72 años, fue enviado al Hospital Bellevue de Manhattan para un “tratamiento de urgencia debido a un alarmante resultado en un análisis de sangre que requiere atención médica inmediata”, dijo su abogado, Imran Ansari, en un comunicado.

“Se espera que permanezca allí hasta que su estado se estabilice”, continúa el comunicado. “Su privación de atención no es solo una negligencia médica, sino una violación de sus derechos constitucionales”.

Un portavoz del Departamento Correccional de Nueva York no respondió inmediatamente a un correo electrónico. La base de datos de reclusos del organismo confirmó que Weinstein había sido trasladado de Rikers Island al pabellón penitenciario del hospital Bellevue de Manhattan.

Weinstein ha estado bajo custodia de la ciudad desde principios de este año después de que el Tribunal de Apelaciones de Nueva York anulara su condena por violación en 2020 en el estado. El caso volverá a juzgarse en 2025. Weinstein ha negado haber cometido delito alguno.

En una presentación legal la semana pasada, los abogados de Weinstein acusaron a la ciudad de proporcionarle atención médica deficiente para una letanía de aflicciones médicas, que incluyen leucemia mieloide crónica y diabetes.

“La última vez que lo visité, lo encontré con salpicaduras de sangre en su uniforme de recluso, posiblemente de suero intravenoso, ropa que no se había lavado en semanas y ni siquiera se le había proporcionado ropa interior limpia, unas condiciones difícilmente higiénicas para alguien con graves afecciones médicas”, dijo Ansari en un comunicado en el que comparaba Rikers Island con un “gulag”.

El conflictivo complejo penitenciario, situado en una isla del East River de Nueva York, se ha enfrentado a un creciente escrutinio por los malos tratos infligidos a los detenidos y por sus peligrosas condiciones. La semana pasada, un juez federal despejó el camino para una posible absorción federal del sistema penitenciario, al considerar que la ciudad había puesto a su población encarcelada en “peligro inconstitucional”.

Juda Engelmayer, publicista de Weinstein, compartió la acusación en un comunicado el lunes.

“Al señor Weinstein, que padece varias enfermedades, entre ellas leucemia, se le ha privado de la atención médica que merece alguien en su estado médico, preso o no”, dijo. “En muchos sentidos, este maltrato constituye un castigo cruel e inusual”.