Washington (CNN) –– Elon Musk y Vivek Ramaswamy propusieron que el país detenga su ritual bianual de retroceder y adelantar los relojes, y abogan por el fin permanente de los cambios de horario en una medida que ha obtenido un amplio apoyo en el pasado.
En una serie de publicaciones en X la semana pasada, ambos empresarios pidieron que Estados Unidos deje de cambiar su huso horario dos veces al año. Musk declaró que los estadounidenses quieren que su país “¡elimine los molestos cambios de horario!” y Ramaswamy describió la práctica centenaria como “ineficiente y fácil de cambiar”.
No está claro cuán en serio están tomando los dos hombres esta iniciativa y si tienen la intención de priorizar esta medida para su recién formado “Departamento de Eficiencia Gubernamental”, al que el presidente electo Donald Trump le encomendó revisar el funcionamiento del gobierno e identificar y hacer recomendaciones para eliminar procesos o programas considerados redundantes.
Si bien otros objetivos propuestos por Musk y Ramaswamy para que su departamento los aborde fueron criticados por ser difíciles de manejar o imposibles, el cambio de reloj semestral es una tradición que perdió su atractivo para muchos votantes, según muestran las encuestas.
Y el cambio, si se aprueba, sería la recomendación de mayor impacto lanzada por Musk y Ramaswamy hasta el momento, y afectaría la forma en que cientos de millones de personas comienzan y terminan sus días. También es una idea que algunos miembros clave de la administración entrante de Trump y del bloque republicano en el Senado han apoyado abiertamente durante años.
Pero algunos expertos dicen que la suposición de que la posible eliminación de los cambios de horario causará grandes cambios es exagerada.
“Creo que esto es realmente una discusión entre gente madrugadora y gente nocturna”, dijo el Dr. Jadrian Wooten, profesor asociado universitario del Departamento de Economía de Virginia Tech, quien estudió los riesgos y beneficios del horario de verano.
Los beneficios que defienden quienes prefieren más luz por la mañana podrían ser, a la inversa, ciertos para quienes prefieren más luz por la tarde. Por cada estudio que muestra algo positivo en un sentido, otro estudio puede mostrar algo positivo en el otro.
En el debate hay tres bandos diferentes. Unos defienden que se dejen los cambios de hora como están actualmente, en el que la mayoría del país adelanta los relojes en marzo y los atrasa en noviembre. Este enfoque intenta equilibrar la cantidad de luz solar que recibe la gente en un día determinado y logra un compromiso entre quienes prefieren más luz solar por la mañana y quienes prefieren más por la tarde; cada grupo obtiene su preferencia en diferentes momentos del año. Es la solución ideal.
La segunda postura es la de establecer un horario estándar permanente y mantener los relojes como están desde noviembre hasta marzo durante todo el año. Esto haría que en algunas partes del país los amaneceres y anocheceres fueran más tempranos de lo habitual durante esos cinco meses, lo que dejaría más luz por la mañana y menos por la noche. Este enfoque cuenta con el apoyo de grupos médicos y profesionales que afirman que es el que mejor se ajusta al ritmo circadiano natural del cuerpo.
“Si recibimos demasiada luz demasiado tarde por la noche, se altera el sueño y, en esencia, estamos creando un entorno durante meses en el que recibimos luz en un horario que es más tarde en el día de lo que es óptimo para nuestra salud”, dijo el Dr. Adam Spira, profesor de la Escuela de Salud Pública Bloomberg de Johns Hopkins, que estudia los beneficios de los hábitos de sueño saludables.
“Ya somos una sociedad privada de sueño”, dijo Spira, “y estamos haciendo que sea más difícil para la gente conciliar el sueño”.
Este enfoque también resuena entre los padres que no quieren que sus hijos esperen el autobús escolar bajo un cielo matutino oscuro.
“Son niños que se preparan para ir a la escuela”, dijo Wooten, el economista de Virginia Tech. “Son niños que se suben al autobús. Ya sabes, es muy peligroso dejar a los niños esperando el autobús por la mañana cuando está muy oscuro afuera, así que si tienes ese tiempo extra por la mañana, es una mañana más segura para la mayoría de las personas, ¿no?”
El tercer grupo aboga por un horario de verano permanente. El Sol saldría y se pondría más tarde, lo que daría a la gente menos luz natural por la mañana y más por la tarde. Este planteo suele contar con el apoyo de grupos y organizaciones de comercio minorista, empresas y restaurantes que quieren que la gente tenga suficiente luz natural después del trabajo o la escuela para estar fuera y participar en la economía, y de quienes sostienen que una mayor luz natural por la tarde podría reducir la delincuencia.
Las razones para apoyar a cualquiera de los bandos en este debate son tan diversas como las experiencias de vida personales de cada individuo; algunos padres pueden preferir que sus hijos no esperen el autobús durante una mañana oscura, mientras que otros padres pueden preferir que haya algo de luz mientras ven a sus hijos practicar deportes después de la escuela.
Si bien Musk y Ramaswamy dijeron que apoyan la eliminación de los cambios de hora, no está claro si están proponiendo que el país adopte un horario de verano permanente o un horario estándar permanente. Musk pareció indicar su apoyo a ambas ideas contradictorias en sus mensajes a X la semana pasada.
“¡Parece que la gente quiere abolir los molestos cambios de horario!”, escribió en respuesta a un usuario de X que realizó una encuesta que mostraba un amplio apoyo a la abolición del horario de verano.
Horas después, respondió con un entusiasta “¡Sí!” cuando el senador de Florida Rick Scott promocionó la Ley de Protección del Sol, una legislación que él apoya y que “bloquearía el reloj” y convertiría el horario de verano en el estándar. Esa publicación, que decía que el horario de verano “tiene que desaparecer”, finalmente fue eliminada porque contenía lo que la oficina de Scott describió como un error tipográfico.
Scott, cuyo intento fallido de alcanzar el liderazgo del Senado fue apoyado por Musk y que ahora forma parte del grupo parlamentario DOGE en el Senado, firmó una versión estatal de ese proyecto de ley cuando era gobernador de Florida en 2018.
“Los floridanos están hartos de cambiar la hora porque todos queremos más sol”, dijo Scott en una declaración de octubre en la que promocionaba el proyecto de ley. “Es hora de que el Congreso actúe, apruebe la Ley de Protección del Sol y bloquee el reloj”.
Los intentos anteriores de hacerlo fracasaron. El horario de verano se introdujo por primera vez durante la Primera Guerra Mundial para ayudar a la productividad industrial del país durante la Gran Guerra y no, como sugieren con frecuencia los rumores populares, para dar a los agricultores más tiempo durante la cosecha.
El horario de verano se mantuvo como permanente durante la mayor parte de la Segunda Guerra Mundial, también por razones relacionadas con la industria y la energía. Durante la crisis del gas en la década de 1970, el país intentó aplicar nuevamente permanente el horario de verano, pero la aprobación pública se desplomó después de las quejas de niños atropellados por automóviles mientras esperaban el autobús por la noche.
Los estados no están obligados a cambiar sus relojes; Hawai, la mayor parte de Arizona y algunos territorios estadounidenses en el Pacífico y el Caribe no contemplan el horario de verano. En 2022, el Senado de Estados Unidos aprobó una ley que establecía el horario de verano como el predeterminado, pero la Cámara de Representantes no la votó. Y el año pasado, un grupo bipartidista de senadores volvió a presentar una legislación que haría permanente el cambio al horario de verano. Ahora, con el posible apoyo de uno de los hombres más ricos del mundo, el país puede prepararse para hacer otro cambio, de una forma u otra.
Se espera que Musk y Ramaswamy se dirijan a los miembros republicanos de la Cámara de Representantes y del Senado el jueves por la tarde, y se prevé que la reunión se centrará en el flamante “Departamento de Eficiencia” recién formado.