(CNN) – En apenas unas horas, Corea del Sur, conocida durante décadas como una democracia vibrante después de la transición del gobierno autoritario de posguerra, ha quedado sumida en el caos político.
Después de que el presidente Yoon Suk Yeol declarara la ley marcial de emergencia por primera vez desde 1980, los legisladores se reunieron y votaron de forma unánime para bloquear la medida.
Algo de contexto: Según la constitución del país, el presidente tiene el poder de declarar la ley marcial extraordinaria, lo que permite medidas especiales que influyen en las libertades de expresión, prensa, reunión y asociación.
El presidente debe notificar a la Asamblea Nacional de su decisión, pero si la mayoría de los legisladores votan para levantar la ley marcial, “el presidente deberá cumplir”, según la constitución.
El gabinete del presidente debe entonces “deliberar” y revisar la decisión de levantar la ley marcial, según la constitución.
No está claro si Yoon cumplirá con la votación de los legisladores como lo exige la ley, o qué dirá el gabinete.
Incluso el líder del partido gobernante de Yoon, el Partido del Poder del Pueblo, Han Dong-hoon, pidió al presidente que levantara el decreto, según la agencia de noticias Yonhap.