Honda y Nissan están discutiendo una posible fusión, que potencialmente uniría a dos titanes de la industria automotriz japonesa que recientemente han pasado por tiempos difíciles.
Las empresas dijeron en un comunicado que han estado conversando, pero no ofrecieron detalles ni plazos para completar un acuerdo, si es que se concreta. Tampoco está claro qué forma podría adoptar la posible empresa conjunta. Nikkei fue el primero en informar sobre la noticia de una posible fusión este martes.
“Como se anunció en marzo, Honda y Nissan están explorando varias posibilidades de colaboración futura, aprovechando las fortalezas de cada uno”, dijeron este martes las compañías en un comunicado. “Si hay alguna novedad, informaremos a nuestras partes interesadas en el momento adecuado”.
En marzo, Honda y Nissan anunciaron que se asociarían en el ámbito de los vehículos eléctricos y en agosto dijeron que colaborarían en el ámbito de la tecnología de baterías. Sin embargo, podrían beneficiarse de profundizar sus vínculos, ya que ambos han enfrentado desafíos este año.
Ambas compañías, al igual que muchos fabricantes de automóviles no chinos, han tenido dificultades en el alguna vez prometedor mercado chino, el mayor mercado de automóviles del mundo. Los consumidores chinos habían acudido en masa a las marcas extranjeras, pero en gran medida se han decantado por las marcas nacionales, que tienen un mejor valor percibido en el país. El Gobierno de China también ha proporcionado incentivos para ayudar a acelerar la adopción por parte de los clientes de vehículos eléctricos e híbridos enchufables.
Aunque ambas compañías ofrecen vehículos eléctricos y enchufables (Nissan, en particular, fue pionera en tecnología de vehículos eléctricos), marcas chinas como BYD han eclipsado su tecnología y sus precios son más económicos.
Nissan también ha tenido problemas desde que su ex-CEO Carlos Ghosn se convirtió en fugitivo y huyó de Japón a su el Líbano natal. Ghosn fue arrestado en Tokio en 2018 bajo sospecha de mala conducta financiera y Nissan lo despidió. Ghosn ha negado repetidamente los cargos.
Su destitución sacudió la poderosa alianza automotriz entre Nissan, Renault y Mitsubishi. Renault, que en su día fue la mayor asociación automotriz del mundo, ha reducido drásticamente su participación en Nissan, lo que ha debilitado al fabricante de automóviles japonés.