Estados Unidos trasladó a un detenido de la prisión militar de la bahía de Guantánamo a Kenya, lo que supone el primer traslado de un detenido en más de un año.
Mohammed Abdul Malik Bajabu fue transferido a Kenya casi tres años después de que una Junta de Revisión Periódica determinara que “la detención en virtud de la ley de guerra (…) ya no era necesaria” en diciembre de 2021, según un comunicado del Pentágono publicado este martes. El secretario de Defensa, Lloyd Austin, notificó al Congreso su intención de transferir a Bajabu a Kenya en noviembre. Bajabu nunca fue acusado de ningún delito.
Bajabu había estado detenido desde 2007, dijo a CNN el año pasado Mark Maher, abogado del grupo de derechos humanos Reprieve US que lo representó. De acuerdo con documentos del Departamento de Defensa, Bajabu era un facilitador de al Qaeda en África Oriental antes de ser detenido.
El último traslado de detenidos ocurrió en abril de 2023, cuando un asociado de al Qaeda de 72 años fue trasladado a Argelia después de más de 20 años de detención en Guantánamo.
El presidente Joe Biden se propuso como una de las primeras metas de su administración cerrar el centro de detención de la bahía de Guantánamo, también conocido como GTMO, pero Estados Unidos solo logró avances marginales en el traslado de los prisioneros recluidos allí durante los últimos cuatro años. El centro albergaba a unos 40 detenidos al comienzo del Gobierno de Biden.
De acuerdo con el comunicado del Pentágono, en la prisión militar permanecen 29 detenidos, 15 de los cuales reúnen los requisitos para ser transferidos. Entre los que quedan hay tres presuntos conspiradores del 11 de septiembre cuyos acuerdos de culpabilidad están en el centro de una disputa en curso entre el Pentágono y el juez militar sobre la validez de dichos acuerdos.
El expresidente Barack Obama también prometió cerrar Guantánamo durante su campaña electoral. Incluso, estableció la oficina de comisiones militares y el sistema de la Junta de Revisión Periódica durante su mandato, pero no cerró la prisión durante sus ocho años en el cargo.
Durante el primer mandato del presidente electo Donald Trump, en enero de 2018, firmó un decreto para mantener abierta la instalación, y revirtió así la política de Obama. Trump también planteó la posibilidad de que más prisioneros fueran retenidos en la instalación como parte de su decisión.
“Estados Unidos podrá transportar detenidos adicionales a la Estación Naval de la bahía de Guantánamo cuando sea legal y necesario para proteger a la nación”, señala la orden.
El centro, inaugurado en 2002, estaba destinado a ser un lugar donde se pudiera interrogar a sospechosos de participar en la guerra contra el terrorismo, pero los prisioneros han estado detenidos indefinidamente y, a medida que la guerra estadounidense contra el terrorismo se prolongaba, el centro de detención se convirtió en un símbolo internacional de los abusos de los derechos humanos cometidos por Estados Unidos en la era posterior al 11 de septiembre.