Este lunes fue enviado en prisión preventiva a la cárcel de Támara, al norte de Tegucigalpa, el exjefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de Honduras Romeo Orlando Vásquez Velásquez, acusado de un homicidio ocurrido en julio de 2009, después del golpe de Estado contra el entonces presidente Manuel Zelaya.
El militar retirado fue detenido el domingo acusado por el caso de Isis Obed Murillo Mencías, muerto de un disparo en la cabeza frente al Aeropuerto Internacional Tocotín, en Tegucigalpa, mientras participaba en una manifestación pacífica contra el golpe de Estado, según un comunicado del Ministerio Público.
Vásquez Velásquez también está implicado en el caso de las lesiones graves contra Alex Roberto Zavala Licona, otro manifestante. Según el comunicado del MP de Honduras, “los altos mandos del Estado Mayor Conjunto, responsables directos de comandar y planificar el operativo no solo incumplieron su deber de supervisar y controlar a sus subalternos (…) sino permitieron y facilitaron estas atrocidades.
En su cuenta de X, Vásquez Velásquez informó sobre su detención y dijo que todo es parte de una “persecución política y la manipulación del poder” y negó que él haya dado orden alguna de disparar o atentar contra algún hondureño.
La portavoz del Poder Judicial, Bárbara Castillo, dijo a CNN que el militar en retiro recibió detención judicial por los delitos que se imputan. Agregó que junto a Vásquez Velásquez fueron arrestados por los mismos delitos dos exoficiales más.
Al salir de la audiencia, Vásquez Velásquez reiteró ante medios de comunicación locales que es inocente de los cargos que le imputan y señaló que en el transcurso del juicio lo demostrará.
Vásquez Velásquez encabezó el operativo del golpe de Estado, que incluyó la captura y expulsión de Zelaya de Honduras a Costa Rica el 28 de junio de 2009.
Posteriormente, Vásquez Velásquez se retiró de las Fuerzas Armadas y fundó su propio partido político, Alianza Patriótica Hondureña, participando como candidato en las elecciones presidenciales de 2013, 2017 y 2021.
En comunicados separados, el Partido Nacional y el Partido Liberal de Honduras, opositores al actual gobierno de la presidenta Xiomara Castro ―esposa de Zelaya―, manifestaron su preocupación por estas detenciones y pidieron respeto al debido proceso.