Los incendios forestales comenzaron a estallar en el sur de California el martes por la mañana debido a una tormenta de viento generalizada que podría ser una de las más destructivas en la región en más de una década.
Esto es lo más reciente:
Incendio de rápido crecimiento amenaza con evacuaciones: el incendio de Palisades aumentó a 80 hectáreas cerca del vecindario Pacific Palisades de Los Ángeles y varias estructuras están bajo amenaza, según el Departamento de Bomberos de Los Ángeles. Se han establecido evacuaciones obligatorias para grandes áreas del vecindario costero, incluidas partes de la icónica Pacific Coast Highway. El video de la afiliada de CNN muestra llamas que se arrastran hacia las estructuras y humo que invade el aire en el área. El Centro de Recreación Westwood está abierto como lugar de evacuación.
Incendio de Hollywood Hills: un incendio más pequeño estalló cerca de Sunset Boulevard en Hollywood Hills del condado de Los Ángeles aproximadamente a la misma hora el martes por la mañana, según el Departamento de Bomberos de Los Ángeles.
Advertencia poco común: los condados de Los Ángeles y Ventura están bajo una advertencia de bandera roja de “situación particularmente peligrosa”, la advertencia más grave emitida por el Servicio Meteorológico Nacional (NWS, por sus siglas en inglés), por un alto riesgo de condiciones climáticas peligrosas para incendios desde el martes por la tarde hasta el miércoles por la tarde. “Los vientos destructivos generalizados y la baja humedad probablemente harán que los incendios crezcan rápidamente en tamaño con un comportamiento de fuego extremo”, advirtió el NWS.
Cientos de miles podrían quedarse sin electricidad: es posible que se produzcan cortes de energía mientras los proveedores de energía del sur de California intentan evitar que la infraestructura dañada genere incendios. Más de 400.000 de los 5 millones de clientes de Southern California Edison podrían quedarse sin electricidad en los próximos días, según el sitio web de la empresa de servicios públicos.
Tormenta de viento destructivo que impulsa la amenaza de incendio
Los meteorólogos del Servicio Meteorológico Nacional en Los Ángeles utilizaron el lenguaje más grave posible para caracterizar la tormenta de viento que alimenta la amenaza de incendio. La tormenta de viento “potencialmente mortal” “probablemente será la más destructiva” desde un evento en 2011 “que causó daños extensos a Pasadena y las colinas cercanas del Valle de San Gabriel”, advirtió el servicio meteorológico.
La tormenta de viento de 2011 derribó cientos de árboles y dejó sin electricidad durante días porque los fuertes vientos estacionales de Santa Ana se adentraron en áreas más pobladas y de menor elevación que normalmente estaban protegidas de ellos.
Ese será el caso nuevamente con este evento. Muchas áreas de los condados de Los Ángeles y el este de Ventura, incluidas partes de la cuenca de Los Ángeles y el Valle de San Gabriel, corren el riesgo de ráfagas de viento con fuerza de huracán de 80 a 128 km/h el martes por la tarde hasta las primeras horas del miércoles. Es probable que haya ráfagas de entre 128 y 160 km/h en áreas de mayor elevación.
Los vientos “se acelerarán a niveles peligrosos” a partir del martes por la tarde, según el NWS. Las advertencias de vientos fuertes están vigentes al menos hasta el miércoles para gran parte del sur de California. Los fuertes vientos probablemente causarán la caída generalizada de árboles, así como cortes de electricidad generalizados.
Los vientos también serán lo suficientemente fuertes como para derribar líneas eléctricas, lo que podría generar incendios. Cualquier incendio que se inicie durante esta época podría convertirse rápidamente en un incendio fuera de control.
La sequía extrema durante lo que suele ser la época más húmeda del año también contribuye a aumentar la amenaza de incendios.
El sur de California se ha vuelto progresivamente más seco desde finales del verano después de que las tormentas de otoño e invierno atacaran el noroeste del Pacífico.
Si bien el invierno pasado fue una bendición para la lluvia y la nieve en el suroeste, el péndulo meteorológico se ha inclinado hacia el otro lado del espectro este invierno, un fenómeno que se está volviendo más común a medida que el planeta se calienta y los patrones climáticos cambian de un extremo al otro con mayor frecuencia.
La sequía en gran parte del sur de California se volvió moderada a fines de diciembre, incluida la mayor parte del condado de Los Ángeles, que había estado libre de sequía desde marzo de 2023.
Como resultado, la vegetación está más seca de lo normal en toda la región y es más propensa a que se inicien y se propaguen incendios, según el Centro Nacional Interagencial de Incendios.