La Casa Blanca ha considerado opciones para mantener TikTok accesible a sus 170 millones de usuarios estadounidenses si la prohibición que está programada para entrar en vigor el domingo continúa como se previó.
Sin embargo, los funcionarios de la Casa Blanca dicen que no creen que el presidente Joe Biden tenga la autoridad para diferir la aplicación de una ley que firmó en abril, que requería que la empresa matriz china de la aplicación, ByteDance, vendiera TikTok a propietarios estadounidenses antes del 19 de enero. Si no se vende, TikTok sería excluido de las tiendas de aplicaciones de EE.UU.
La prohibición está programada para entrar en vigor el último día completo de la administración de Biden, a menos que haya una improbable intervención de último minuto por parte de la Corte Suprema. Un funcionario de la Casa Blanca dijo este jueves que, dado que la fecha de la prohibición coincide con el final del mandato de Biden, dependerá de la administración del presidente electo Donald Trump decidir cómo implementar la prohibición.
“Nuestra posición sobre esto ha sido clara: TikTok debería continuar operando bajo propiedad estadounidense. Dado el momento en que entra en vigor, durante un fin de semana festivo un día antes de la inauguración, dependerá de la próxima administración implementarla”, dijo el funcionario.
La ley permite a Biden imponer una extensión de hasta 90 días, pero requiere que el presidente demuestre que las negociaciones sobre la compra de TikTok logran un avance significativo, y ByteDance ha mantenido que no tiene intención de vender la aplicación.
Aún así, algunos legisladores han instado a Biden a otorgar a ByteDance esa extensión. El senador demócrata Ed Markey y el senador republicano de Kentucky Rand Paul escribieron a Biden en diciembre pidiendo un retraso en la implementación de la ley citando “sus consecuencias para la libre expresión”.
Trump, quien ha prometido “salvar TikTok” en un cambio respecto a su apoyo anterior a una prohibición, está considerando un plan que podría darle a ByteDance más tiempo para negociar un acuerdo. Pero cualquier aplazamiento de Trump tendría que llegar después de que la prohibición ya esté programada para entrar en vigencia.
TikTok, extremadamente popular, es donde aproximadamente un tercio de los adultos jóvenes en EE.UU. obtienen regularmente sus noticias. No obstante, tanto Trump como Biden han expresado preocupaciones en el pasado sobre la manipulación de contenido en la plataforma, sus prácticas de recolección de datos y preocupaciones de Seguridad Nacional relacionadas con los vínculos de su empresa matriz con China.
Sin embargo, en un guiño a cuán influyente es la aplicación, tanto Trump como la fallida campaña presidencial de Biden 2024 se unieron a TikTok después de haber pedido que se prohibiera.
Trump ha tomado recientemente un papel más activo contra la prohibición. Se reunió con el CEO de TikTok en Mar-a-Lago después de su victoria electoral. Ese CEO, Shou Chew, se espera que se una a varias otras figuras tecnológicas prominentes en la inauguración de Trump el lunes. Y el mes pasado, Trump pidió a la Corte Suprema que detuviera la prohibición.
“Hay preocupaciones válidas de que la ley pueda sentar un peligroso precedente global al ejercer el extraordinario poder de cerrar toda una plataforma de redes sociales basada, en gran parte, en preocupaciones sobre el discurso desfavorecido en esa plataforma”, dice el informe de Trump.