El presidente Gustavo Petro anunció este viernes la suspensión del proceso de diálogo de paz con el Ejército de Liberación Nacional (ELN) debido a los recientes hechos de violencia en la región del Catatumbo, del noreste de Colombia y fronteriza con Venezuela.
“Lo que ha cometido el ELN en el Catatumbo son crímenes de guerra. Se suspende el proceso de diálogo con este grupo, el ELN no tiene ninguna voluntad de paz”, dijo el mandatario en su cuenta en X.
El Ejército Nacional de Colombia informó el viernes que unos 300 militares han sido desplegados para neutralizar confrontaciones entre grupos guerrilleros en diferentes zonas del Catatumbo.
La Defensora del Pueblo, Iris Marín Ortiz, informó en X que su oficina ha registrado al menos cinco muertos y 10 heridos. Además, pidió al ELN que respete el derecho internacional humanitario y “cese de inmediato los ataques contra la población”.
El proceso de paz entre el gobierno y esa guerrilla ya atravesaba por un momento crítico debido a las denuncias de ambas partes de incumplimientos del cese al fuego y de hostilidades. La situación se complicó aún más en las últimas horas debido al recrudecimiento de las acciones armadas en el Catatumbo.
Esta semana estalló un enfrentamiento entre grupos al margen de la ley que han sembrado zozobra entre la población civil. Varias personas han sido asesinadas. Otras, desplazadas por los combates entre la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que se disputan el control territorial.
“La JEP (Jurisdicción Especial para la Paz) rechaza y condena los ataques violentos ocurridos en la zona del Catatumbo, en los que fueron asesinados civiles”, sostuvo este jueves en un comunicado la institución, creada en el acuerdo de paz entre el Gobierno y las FARC para administrar justicia transicional por delitos cometidos en el conflicto armado.
La JEP resaltó que entre las víctimas mortales de los recientes hechos violentos figuran el compareciente Jhan Carlos Carvajalino Quintero, así como los firmantes de paz Yurgen Martínez Delgado, Albeiro Díaz Franco y Pedro Rodríguez Mejía.
La situación de orden público en la zona es bastante delicada. Varios habitantes del Catatumbo han tenido que salir huyendo de la zona ante las amenazas de los grupos armados que han recrudecido sus acciones desde inicios de semana.
“Ante los cruentos ataques del ELN en la zona del Catatumbo, en los que a esta hora se registran víctimas civiles y muertes de firmantes de paz, nuestra delegación exige al ELN cesar de manera inmediata estas acciones, acabar con los enfrentamientos con las disidencias y respetar a la población civil”, manifestó este jueves en un comunicado la delegación del gobierno colombiano en la mesa de diálogos de paz con esa guerrilla.
El senador del partido oficialista Pacto Histórico Iván Cepeda, que forma parte del equipo negociador, publicó en su cuenta de X un desesperado mensaje del líder campesino José del Carmen Abril, quien dice temer por su vida y por la integridad de su comunidad ante la arremetida de la guerrilla.
“Nos encontramos por aquí refugiados en una loma porque la situación de conflicto entre el ELN y las FARC se agudizó. Hay muchos muertos, han matado excombatientes, se han llevado retenidos, están entrando a las casas y sacan a todo el que haya: niños, mujeres y todo. Y hoy temo por mi vida porque han ido a buscarme a la casa cuatro veces”, relata Abril en la grabación, en la que se escuchan llantos.
Además, hace un llamado a las autoridades para atender la situación de inseguridad, del que Cepeda hizo eco.
“Llamo al ELN a respetar la vida de José del Carmen Abril, líder campesino del Catatumbo. Lo conozco desde hace años, sé de sus luchas y de su vida consagrada a la causa del movimiento campesino de ese territorio”, sostuvo el legislador.
Las negociaciones de paz entre el gobierno colombiano y el ELN no pasan por un buen momento. La delegación de esa guerrilla en la mesa de diálogos no se ha pronunciado sobre estas graves acusaciones. El último comunicado en su cuenta oficial en X fue el pasado lunes, en la que cuestionan los alcances del plan de paz del Gobierno e insinúan que hay operaciones militares encubiertas contra el grupo armado ilegal.
Antonio García, jefe del ELN, tampoco se ha pronunciado sobre la situación actual en el Catatumbo.
El representante especial del secretario general de la ONU en Colombia, Carlos Ruiz Massieu, también ha rechazado la escalada violenta en la región del Catatumbo. “Expreso mi más firme condena por asesinato de cinco firmantes de paz y líderes en Catatumbo. Urge proteger a población civil y comunidades. Llamo a los grupos armados a cesar acciones violentas. La verdadera voluntad de diálogo pasa por respetar la vida de quienes optaron por la paz”, dijo Ruiz Massieu en un pronunciamiento en su cuenta en X.
El presidente Gustavo Petro ha apostado a los diálogos con diferentes grupos armados en el país dentro de su política de paz. Pero lo cierto es que aún no hay resultados concretos de estas gestiones, ni con el ELN ni con las disidencias de las FARC ni con grupos al servicio del narcotráfico como el Clan del Golfo. Y entre tanto, la violencia se ha recrudecido, especialmente en zonas con fuerte presencia de cultivos ilícitos, de hoja de coca y de minería ilegal.
Ya en septiembre de 2024, Petro había anunciado un cierre al proceso de paz, tras un ataque que dejó dos soldados muertos y 26 heridos en el departamento de Arauca. El presidente describió el hecho como una acción que cerraba un proceso de paz con violencia, perpetuando un ciclo de guerra y muerte en el país.