(CNN Radio Argentina)- Los presuntos abusos sexuales denunciados en el Instituto Próvolo para niños hipoacúsicos representan “el mayor caso” de este tipo destapado en la Iglesia Católica Argentina y “tiene ribetes realmente a punto de ser escalofriantes”, dijo este jueves la periodista de CNN Emilia Delfino, que investigó esta supuesta red de pedofilia enquistada en Mendoza y La Plata.
Delfino afirmó en Café con Pepe que el escándalo “es considerado el mayor caso de abusos sexuales a menores de la Iglesia Católica Argentina” y precisó que se habría iniciado en la sede del instituto en Mendoza “a fines de 2016” y en 2018 se trasladó además a La Plata.
“La última novedad -indicó la periodista- es que uno de los acusados está pasando sus días” en “una casa del Instituto Próvolo en Verona”, norte de Italia, y Argentina lo está reclamando” en extradición.
Se trata del religioso José Eliseo Pirmati, de 83 años y nacionalidad italiana, acusado de los supuestos delitos de abuso sexual agravado, exhibiciones obscenas y corrupción de menores, según determinó la fiscal que investiga el caso en La Plata.
Sus víctimas habrían sido niños sordos de entre ocho y 15 años, todos alumnos del Instituto Antonio Próvolo. Pero el caso contra esta institución no empieza ni termina en Argentina porque más de una decena de alumnos en Verona alegan haber sido víctimas de abusos desde 1950.
Los abusos sexuales se habrían extendido durante siete décadas en las tres principales sedes del instituto, contando las de Mendoza y La Plata. Alberto Bochatey, nombrado interventor de la congregación del Próvolo por el Papa Francisco, dice que Pirmati mantiene su inocencia y aún no ha nombrado a sus defensores legales. CNN intentó contactarlo sin éxito pero el medio italiano L’Espresso de Milán encontró a Pirmati en Verona donde lo cuestionó sobre las acusaciones que enfrenta en Argentina a lo que el religioso respondió: “No sé nada”.
Un silencio de siete décadas
Para Delfino, estos supuestos abusos “se mantuvieron en silencio durante mucho tiempo: siete décadas”.
“En Verona vienen denunciando desde hace años supuestos abusos sexuales por parte de sacerdotes que ejercían en ese instituto. Hay registros de denuncias que vienen de la década del 50 en Italia. Luego algunos sacerdotes llegan a la sede de La Plata en los 70 y luego fundan en Mendoza” una sede del instituto.
Y agregó: “Uno de ellos, Nicola Corradi, va en 1997 a Mendoza y los abusos continúan” en esa provincia “hasta 2015”.
Delfino dijo que “en agosto comienza el primer juicio contra tres de los acusados” en Mendoza y señaló que la sede provincial del Instituto Próvolo pasaron 230 alumnos entre 2005 y 2015.
“Los abogados y el fiscal quieren entrevistar a todos ellos. Se hicieron alrededor de 30 cámaras Gesell y se dio por probado que 26 fueron supuestamente abusados por curas del Instituto Próvolo”.
La periodista recordó que “cuando comienza el caso en Mendoza” el Papa Francisco mandó un interventor encargado de las sedes del instituto en todo el mundo.
“La particularidad de esta congregación es que es autónoma. La Iglesia de Verona, de Mendoza y La Plata sostienen que ellos no tienen potestad para gobernar dentro de estas congregaciones y dependen del Vaticano. La intervención buscaba ordenar y colaborar con la justicia”, apuntó.
Delfino dijo que “el fiscal de La Plata pidió la detención y extradición de Permati que “trabaja codo a codo con los sacerdotes”. “Es italiano, llegó en los 70 desde Verona y permaneció en Argentina durante 43 años” hasta que se fue 2017 a su país.
Recordó cuando estalló la causa la justicia “avanzaba contra Corradi” y detenía a sospechosos en Mendoza. Entonces Permati “decide irse a Verona”, apuntó.
Abusos en La Plata
“En septiembre de 2018 uno de los alumnos de La Plata declara como testigo en Mendoza y revela que también sucedían” abusos en La Plata en las décadas del 80 y 90. La justicia manda ese testimonio a La Plata para que se abra una nueva causa y fue avanzando contra Corradi y contra Pirmati que tiene este pedido de extradición para que sea entregado a las autoridades en Argentina y rinda cuentas de las acusaciones” en el país, aseveró.
Y concluyó: “Esto sigue. Las autoridades italianas tienen que definir el pedido de extradición. Está en trámite de traducción desde hace casi seis semanas. La justicia espera que esto se agilice y que las autoridades decidan” si lo extraditan. Los abogados tienen esperanzas”.