En la Ciudad los alumnos volverán gradualmente a las clases presenciales.

(CNN Radio Argentina) – Soledad Acuña, ministra de Educación porteña, afirmó este sábado en CNN Radio que “ningún chico se va a quedar sin ir a la escuela hasta fin de año”, aunque señaló que no se trata de “una vuelta a clases” en forma convencional.

Las escuelas se encargarán de conversar con las familias de los alumnos para implementar el regreso a las clases presenciales por grupos, explicó la funcionaria de la gestión que encabeza Horacio Rodríguez Larreta, al tiempo que recalcó la importancia de “recomponer un espacio de pertenencia” para la comunidad escolar.

En el programa Digamos todo, con la conducción de Nacho Girón, Acuña manifestó los factores decisivos para instrumentar las nuevas medidas: “La tasa de circulación del virus empezó a bajar en la Ciudad. Y especialistas a los que escuchamos sostienen que aislamiento les ha generado enormes daños a los chicos, entre ellos trastornos de sueño y dolores de cabeza y de estómago. Además, tenemos la evidencia de que en Europa y en muchos países con coronavirus en las escuelas hubo presencia al 100 por ciento sin que se produjeran focos de contagio. Es más seguro que los alumnos estén en el colegio”.

“Hoy los chicos y las chicas en el único lugar en el que no están es en la escuela”, aseveró, al tiempo que aclaró que la reinserción “va a depender de la propuesta de cada establecimiento, que trabaja según las características de su población. Vale la penda hacer la diferencia”.

“La enorme mayoría de los chicos quiere recuperar este espacio”, evaluó. Y se refirió al rol de los sindicatos y sus objeciones sobre el retorno a las aulas: “Siempre primero te tiran un no. Podemos conversar, pero no les vamos a pedir permiso para tomar decisiones ni a discutir políticas públicas con ellos”.

Desde el lunes, todas las escuelas estarán habilitadas para presentar propuestas de revinculación a las familias de alumnos de jardín de infantes, primaria y secundaria. El ciclo lectivo 2021, en tanto, será obligatorio y comenzará durante febrero en la Ciudad, si las condiciones sanitarias lo permiten.

“Hay un montón de maestros que están haciendo tareas y nos piden volver a reunirse con sus alumnos”, concluyó.