(CNN Radio Argentina) – Los hermanos Ángel y Oscar Romero están en el centro de la escena desde hace tiempo en San Lorenzo. Desde la llegada de Diego Dabove, los futbolistas paraguayos perdieron sus lugares entre los titulares. “Puede haber celos por sus cualidades futbolísticas”, consideró este martes en CNN Radio Hernán Acuña, exentrenador de las divisiones inferiores de Cerro Porteño y que los supo tener en sus inicios en la profesión.
En este sentido, en diálogo con Nicolás Singer en el programa CNN Deportes en síntesis, Acuña se mostró “sorprendido por lo que les sucede” a los jugadores en el plantel de San Lorenzo y los supuestos roces con sus compañeros en el vestuario. “Cuando llegaron a Cerro con 16 años siempre fueron obedientes”, recordó.
Y amplió: “Siempre tuvieron una buena conducta con sus compañeros. Nunca escuché que tuvieran problemas en Cerro Porteño. Quizás hay un mal entendiendo sobre su conducta”.
“Es probable que haya una falta de definición sobre las personas que los rodean. Saben que son autosuficientes y eso nos da la posibilidad de sentirnos seguros para realizar nuestros actos”, argumentó, y consideró que “dependiendo del carácter de las personas puede ser mal visto”.
Tanto Ángel como Oscar fueron suplentes en la derrota del último lunes de Ciclón frente a Colón en Santa Fe. Ambos ingresaron en la segunda etapa y mostraron algunas de sus virtudes que los podría poner en el once inicial en la próxima fecha.
“Crean celos en el entorno. Puede haber celos por sus cualidades futbolísticas”, añadió Acuña, quien abandonó el club paraguayo en el 2015.
Su recuerdo de los Romero en Cerro Porteño
“Ellos llegaron en el 2008 a los 16 años. Vinieron a una prueba que realizamos como rutina cada fin de año o inicio de año. Se probaron en mi categoría que era la sub 16 y me bastaron 25 minutos para decidir que tenían que quedarse los dos en el club”, relató.