“Actualmente tenemos precios atrasados de hace tres meses”, añadió.
En diálogo con CNN Economía, el especialista en ahorro también explicó que “los envases son cada vez más chicos para que el precio no aumente tanto. Por eso hay que estar viendo precio por kilo o por litro para comprar bien las cosas”.
Otra de las recomendaciones hizo Gorodisch es la de chequear en el mismo supermercado los precios que figuran en el ticket de compra una vez que pagamos: “Muchas veces pasa que el precio en góndola es menor al que te cobran en la caja. Esto se debe a que los precios aumentan todos los días y los repositores no los renuevan diariamente”.
“No aumentan por minuto, pero sí hay aumentos de precios todos los días. Si te das cuenta, te devuelven la diferencia. Es por eso que conviene revisar el ticket en el mismo supermercado y no en tu casa”, explicó.
Por otra parte, el escritor recomendó “prestar atención a los códigos de barra porque por ahí el producto de Precios Cuidados no coincide con el que está en la góndola ubicado arriba del código. Puede ser la misma marca, que se parezca mucho pero no es el mismo código. Hay que comparar el papel de la góndola con el del producto”.
“Serle infiel al supermercado”
Por último, Gorodisch aseguró que es clave “serle infiel al supermercado” ya que al “recorrer varios con el fin de comparar precios se pueden encontrar los más baratos. Puede que el precio de una yerba esté hasta un 30 % más bajo en un super cercano”.
“El gobierno tiene una aplicación que se llama Precios Claros, donde por localización podés encontrar el mejor precio”, culminó.