(CNN Radio Argentina)- El artista callejero Waldo Mandiello conversó con CNN Redes y Noticias a propósito de la actividad artística que realiza y su búsqueda como poeta intentado dar con un cause donde expresar mejor sus obras. Además dio su opinión y crítica sobre las redes sociales, ya que su obra es portavoz de una serie de mensajes capaces de hacernos reflexionar sobre las relación que tenemos con nosotros mismos y con los otros.
Waldo Mandiello es un joven artista visual urbano, un poeta callejero que nos invita, a través de sus intervenciones en el espacio público, a reflexionar y a pensarnos mejor. Reconocido inicialmente por sus sobres pintados cargados de mensajes (con ahorro de palabras, más no de ideas), Mandiello fue ampliando su campo de trabajo siempre utilizando la poesía como medio y a la calle como soporte.
El código visual
Esta tarde de domingo, el conductor de Redes y Noticias, Federico Clarat dialogó con el poeta callejero a través del aire de CNN Radio. Mandiello hace arte, y fue en los inicios de su búsqueda por expresarse cuando encontró un código visual con el que sentirse identificado y al cual abrazar. “Yo sabía que quería un código que simbolizara mi arte y como me gusta mucho escribir y reflexionar acerca de cómo nos relacionamos, encontré ayuda en mi amigo (el artista cinético Parratoro) para hallar el mío, que, desde un principio fue un sobre blanco (de carta)”. En este sentido, el artista agregó: “Creo que La idea era simbolizar mi sentir a nivel emocional con la letra escrita, el peso de la palabra y su significado, más el mensaje que sintetiza una idea que alguien lee al pasar y se llevársela consigo”.
Un artista se prepara y busca
“Yo soy un artista que gusta mucho de la escritura, siempre escribí poesía, pero en un principio de la búsqueda no encontraba aquel soporte con el que me sintiera cómodo para exponerme; por eso hacer un libro me parecía algo muy grande y lejano para mí”, dijo el artista en referencia al camino que lo llevaría a encontrar la manera de salir a las calles a hacer arte. Asimismo, el poeta advirtió: “Algo ocurrió cuando una vez me tocó trabajar en la creación de una gacetilla de prensa sobre el Arte urbano; esa tarea me obligó a investigar el tema de modo tal que sin pensarlo, de repente sentí que era en la calle donde me sentía cómodo, y que sería la calle el soporte de mi arte”.
Soy Poeta y callejero
El mensaje que irrumpe, como el amor
Al ser consultado por cómo se le fueron ocurriendo los mensajes (que contienen sus obras y viceversa), Mandiello contó: “El paso siguiente a la decisión de tomar este camino fue la duda, y la sentí porque consideraba que en mi trabajo me faltaba la síntesis escrita para tal o cual idea; lo que yo escribía era demasiado extenso para que llamara la atención de alguien que camina por las calles con rapidez”. En este mismo sentido, el artista continuó su relato y confesó: “Por ese entonces había retomando contacto con una antigua novia con la que había cortado hace un tiempo, pero yo estaba con ganas de volver. Cuando conversamos ella me cuestionó que le parecía raro que yo ya no las siguiera más en redes y fue en esa instancia que surgió una respuesta que luego se hizo conocida en forma de Obra: “No quiero seguirte en Instagram, quiero tomarme un vino con vos”.
Era por acá
En esta misma línea a seguir es que el artista urbano puntualizó: “En aquel momento arrancó una manera de buscar un camino (o varios) a partir de este concepto que está muy relacionado con la manera en la que nos comunicamos y decidimos relacionarnos con los otros. El disparador tal vez fue esa situación, pero seguramente este era el camino que debía tomar, y lo hice”.
La popularidad en las redes
Al ser consultado acerca de la obra que considera que lo ha vuelto más popular, Mandiello dijo: “No se si hay una frase que me haya hecho trascender más que otra. Todas son honestas y siempre están atadas a un concepto. De todos modos entre las más populares sí puedo decir que son: “No quiero ver tus historias, quiero que me las cuentes con unos vinos”; Toque corazones no bocinas”, etc…
Antes del final, en referencia a la respuesta del público, el artista comentó que sí existen devoluciones muy positivas de personas que lo siguen o bien de quienes lo acaban de descubrir al tiempo que confesó sentir una gran satisfacción por lo que con su arte despierta en la gente aunque advirtió que no trabaja de antemano para que eso suceda.
Vínculos Y Redes, relaciones reales?
“Yo creo que las redes simplifican muchas cosas, te ayudan a comunicarte y acercan distancias pero también siento que hace falta algo del orden del equilibrio, porque a pesar de que han llegado para facilitarnos la vida y para acortar distancias, también creo que hoy pasamos más tiempo tratando de demostrar algo en redes que en escucharnos en nuestros diálogos internos”, opinó el artista, al tiempo que destacó: “En cuanto a los vínculos y relaciones, a veces estamos a cinco cuadras y en vez de vernos para hablar, pasamos horas con el celular en la mano, chateando. Hay una realidad que ya la conocemos todos y que no está tan buena; cuántas veces nos pasa que nos damos cuenta que el celular nos mantiene en una alerta constante que nos saca del foco y eso no está nada bueno”.