CNNE 1268160 - prigioni

(CNN Radio Argentina) – Pablo Prigioni, entrenador del seleccionado argentino masculino de básquet, habló este jueves en CNN Radio con Juan Pablo Varsky sobre el título obtenido en la AmeriCup (Copa América), la sorpresa de asumir el cargo días antes de que comience el certamen y una emotiva frase sobre el reencuentro con sus compañeros de la recordada Generación Dorada.

“No fue agradable el comienzo del proceso porque si en algún momento pensaba podía dirigir a la selección iba a darse de esta forma. Estaba colaborando en este año, pero cuando se dio lo que pasó con Néstor (García) sucedió de golpe. Lo que no fue en mí individualmente, sino en los chicos que llevaban un mes preparándose para ese torneo…”, explicó Prigoni en el programa La Tarde de CNN.

Y profundizó: “Me enfoque en los demás y esperé la respuesta de Minnesota (forma parte del staff). Fui a conversar con ellos y tuve un gran apoyo de la franquicia de la NBA y del entrenador. Se pusieron orgullosos y estuvieron conmigo para ir para adelante”.

“Había que tomar una decisión rápida y decirle algo a los jugadores. Pasó todo muy rápido. No lo pensé mucho y pensé en tirar para adelante”, agregó, y a partir de allí comenzó a construir lo que sería un nuevo título para el conjunto nacional.

Por eso, el exbasquetbolista aclaró: “Como fiel integrante de la selección argentina siempre pensé en el equipo y lo mejor para este grupo de jugadores. Ellos estaban muy bien y me daban la confianza de que lo podían hacer muy bien”.

De menor a mayor

“Intenté simplificarles la vida a los jugadores. Fuimos con algo simple: menos es más. Buscamos un poco de estructura en lo que faltaba y no interferimos tanto. Se conocen y hay mucho ganado en ese grupo. Se miran Campazzo y Deck y ya se entienden. El equipo empezó de menos a más y la dificultad del calendario también fue de esa forma. Fueron ganando confianza y subía el nivel de exigencia”, comentó sobre el torneo disputado en Recife, Brasil.

La final

Prigioni contó que no había muchas dudas a la hora de preparar el encuentro definitorio ante el anfitrión: “Teníamos bastante claro el plan de juego. Coincidimos en las claves… Ellos dependen mucho del tiro de tres puntos y la idea fue bajarles la efectividad. Quisimos intentar que anotaran los bases y no repartieran tanto los puntos. Iba  a ser una cancha bien brasileña y los árbitros no nos iban a ayudar en nada. Hubo que apuntar a la parte mental para crear una vivencia que la podíamos recordar siempre”.

La eterna Generación Dorada

Prigioni, parte fundamental de la denominada Generación Dorada en Argentina, contó cómo fue el reencuentro con sus excompañeros en Nueva York: “Me tomé el regalito de pasar el día juntos. Es difícil de explicar el sentimiento cuando estamos juntos. Capaz no nos vemos por dos años y cuando nos vemos es como si no pasara el tiempo. Es una relación única y la cuidamos mucho entre todos”.