El Actor, dramaturgo, director de cine y teatro argentino, Norman Briski.

(CNN Radio Argentina)- En el marco del programa Cine Argentino, su conductora, Bárbara Arroyo conversó con el primer actor, dramaturgo, director de teatro y cine, Norman Briski quien se refirió a su actuación en Argentina, 1985.

Argentina, 1985 ya está camino a los premios Oscar de la Academia. El film está inspirado en la historia real de Julio Strassera, Luis Moreno Ocampo y su joven equipo jurídico que se atrevieron a acusar, contra viento y marea, a contrarreloj y bajo constante amenaza, a la más sangrienta dictadura militar argentina. Una batalla de David contra Goliat, con los héroes menos esperados.

Respecto de lo que le significó y siente con la temática del film dirigido por Santiago Mitre, Briski dijo esta tarde de sábado en el aire de CNN Radio: “Es una película significativa porque la velocidad del tiempo parece que los hechos ocurrieron muy atrás y no fue tan lejano en el tiempo”. Además agregó: “Se trata de un acontecimiento histórico difícil de olvidar aún cuando la memoria se pierde fácilmente. Es que con esta vertiginosa vida pareciera que todo pasó hace mucho”.

Lo vivido

Al ser consultado por sus recuerdos de los años de plomo, Briski advirtió: “Yo tuve que exiliarme en aquella época, en momentos de dictadura”. Además, al referirse a cómo el film logra reflejar el fin de una época y la instancia legal, política y social que supo pulsar para la recuperación de la democracia, el inigualable actor dijo: “Lo que sucede es que estas certificaciones de lo que pasó, lo que cuenta la película, para mí es una novedad. Yo no viví la potencia que tuvo Alfonsín para convocar a la reivindicación de la democracia. Claramente había un empuje en la sociedad que hoy se extraña mucho”.

Lo que la película dejó

Respecto de aquellas reflexiones que la película supo dejarle, Briski destacó: “Es un tema muy sensible. Yo creo que este histórico juicio a las juntas, deja, además de otras, la pregunta en el aire de por qué hoy la justicia no tiene ese coraje”. En este sentido, Briski destacó: “También refleja cómo la sociedad aquella, con las manifestaciones populares de entonces, permitió, pujó y dio lugar a que se hiciera justicia de un genocidio que aún duele hoy todos los días”.

En este mismo sentido, el actor advirtió: “Desde entonces, las fuerzas armadas perdieron prestigio hasta para la protección de su propio pueblo”. Al tiempo que agregó: “La película también logra hacernos pensar que aquella justicia, la de aquel momento tenía un valor que hoy ya no tiene”.

Briski, un actor preparado

En cuanto a los personajes de los últimos trabajos para los que fue convocado o bien, iniciativas propias en las que se embarcó, el consagrado actor, comentó: “El personaje que me tocó encarnar en Argentina, 1985 es un hombre que yo lo conocí, no es de ficción”. Por otra parte, continuó: “Además, también actué en Granizo. No obstante, aseveró: Durante la pandemia hice 981 que se trató de un proyecto propio que luego lo llevé al teatro”.

Además, respecto a su actualidad laboral y sus deseos de actuación, dijo: “Soy un jubilado activo que ya no tengo ganas de meterme en trabajos arduos, largos”. En otro orden de cosas, respecto de los festivales que vendrán para el film de Santiago Mitre y más específicamente al ser consultado por la posibilidad de participar de la próxima entrega de la 95.ª edición de los Óscar, organizada por la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas que honrará a las películas estrenadas en 2022 (que tendrá lugar en el Dolby Theatre de Los Ángeles, el 12 de marzo de 2023),  Briski remarcó: “Es un lugar que tiene su encanto, tengo amigos allá que han hecho Beckett, amigos de los más interesantes; y además, puedo comprar material de pesca mucho más barato y variado”.