(CNN Radio Argentina)- Aduana de Palabras dialogó con el reconocido actor, quien adelantó algunos detalles de la tan esperada tira que regresa a televisión abierta con nuevos personajes, cargada de conflictos y situada en una de las épocas más significativas de la historia de nuestro país: El regreso a la democracia.
Por motivos felices, como es un esperado estreno, es que los conductores Mariana Mactas y Bobby Flores quisieron tomar contacto con D´Elia; además de, para conocer de primera mano, qué y cuáles son sus proyectos más cercanos a desarrollar durante este año de trabajo.
De modo tal que, en el comienzo de la entrevista, el actor tan gratamente recordado por su legendario papel de Santos, como absoluto líder de Los simuladores, contó a CNN Radio que se encuentra trabajando en una serie de la cual no podía dar muchos detalles; asimismo puntualizó que durante el 2022 se ocupó de trabajar en la serie próxima a estrenarse; a la vez que remarcó que se encuentra aún a la espera de una película que, según estima, se estaría filmando hacia el mes de octubre.
Días antes del estreno
“Esta tira nos tiene a todos muy entusiasmados, vimos el primer capítulo y creemos que ahí hay algo que salió muy bien, esperemos que así sea”, dijo el actor.
Antes de continuar, y por si hubiera más de un desprevenido, cabe recordar que D´Elia es uno de los protagonistas de serie. En la misma el actor interpreta a Rafael Machado, un médico de clase alta que pertenece a una familia conservadora. Dirige el Hospital Central y, junto con su esposa Sara (Gloria Carrá), son los padres de Luján, Segundo y Alejo, quien perdió la vida recientemente. En esta historia, Rafael luchará por mantener ocultos todos y cada uno de los secretos oscuros de su pasado.
A diferencia de la primera parte, que estaba ambientada en los años treinta, la continuación de la serie transcurre en los años ochenta, tras el regreso de la democracia en la Argentina.
Respecto de lo que implica escribir y actuar en el marco de una historia que logre tocar el tema, y tratar, a partir de algunos relatos, los coletazos de aquel horror aún existentes en aquella sociedad que apenas empezaba a recuperar ciertos aires de libertad con los ecos internos aún latentes, el actor expresó: “Yo aplaudo a los autores que han decidido escribir de este tema, comprometiéndose a hablar del mismo durante 125 capítulos, cosa que no es fácil; porque hay que hacerlo. Y si es verdad que una novela tiene que tener cientos condimentos como ser romance, historias de amor, de desencuentro, etc… (cosa que a mí me encanta y que nosotros hemos perdido mucho como género), hay que ponerse a hablar de lo que fue la dictadura dentro de una novela. Ahí la cosa no es tan fácil”.
En este mismo sentido, y en el marco de una aclaración más que válida, el actor, advirtió: “De todos modos en esta novela en particular, lo que se trata es hacer un retrato de los ochenta para poner en contexto la historia dentro de la década; esta historia empieza con el regreso de la democracia, por supuesto que hay flashback al pasado, a la época de los milicos, lo cual es necesario para situar de dónde venimos y repensar qué cosas han ocurrido”.
“También la serie habla mucho de cosas como: el teatro de revista, el humor de toda una época y la habilitación de ciertas cosas se decían casi como naturalizadas”, destacó el actor. Asimismo, dijo: “En la novela se hacen visibles temas como el SIDA y otras cuestiones que despertaban un puñado de prejuicios por aquellos tiempos. Por supuesto que algunas cosas están matizadas y se tocan a través de las historias de los personajes, pero lo que sí ocurre es que la historia está envuelta en una atmósfera de libertad por el regreso de democracia. Cosa que yo recuerdo como una situación muy feliz y espectacular. Yo era adolescente y la viví así”.
La libetad, el amor y el humor
Retomando el tema del tipo de humor que atravesaba la década de los ochenta, y que, según su protagonista, la tira logra retratar muy acertadamente, D´Elia aclaró: “Recuerdo que era una época en la que nos reíamos de todo y uno no se daba cuenta que había vivido momentos de represión; en verdad supongo que no lo advertíamos claramente porque los militares estaban presente en todo. Pero esto fue hasta el momento en que se fueron. Por supuesto luego empezaron a emerger cosas que, hasta el momento, nos habían parecido inexistentes”.
“Dentro de aquel contexto, y de lo que nos hacía reír, también recuerdo, por ejemplo, la revista HUMOR, (esta sí aún durante la época de la dictadura). Mientras filmaba era inevitable que vinieran a mi memoria cosas que se decían en aquel momento, que no hacían más que exponer el pensamiento de un momento histórico que a mí me tocó vivir. Todo esto, visto a la distancia, nos habla de cómo fueron aquellos años, y sin dudas de cómo fue que algunas cosas luego, las empezábamos a transitar con más liviandad a pesar de los coletazos, de lo vivido, y del dolor”.
La importancia de la memoria histórica
“Está bueno que todo el tema de la dictadura, y también todo lo que tiene que ver con vivir en democracia esté en una tira, porque eso significa que hoy se pone el tema sobre la mesa. Y la idea es que el tema nunca se duerma, porque fue la peor tragedia que nos ocurrió”, agregó el actor, para agregar: “Mi personaje (Rafael Machado), es un hijo de puta. Es médico, y es todo lo que no tiene que ser, todo; él se va desfigurando con todo lo que le pasa dentro de su propia estructura familiar”.
En referencia a las posibles repercusiones a partir de su estreno, el actor expresó: “La grieta es inevitable, como en todo, y va a aparecer a partir de la novela. Cuando existen ganas de discutirlo todo, hasta el punto de huevo frito es motivo para pelear. De todos modos, yo creo que se trata de un producto que está hecho con respeto y siendo también fiel a aquellas cosas de aquella época. Mi personaje, por ejemplo, dice cosas tremendas al día de hoy, pero no se trata de juzgar y cancelar el pasado por la interpretación que podemos hacer en estos tiempos, sino en advertir qué cosas expresaban toda una construcción de época. Y lo que me parece es que, como toda obra artística, lo más conveniente de hacer es ponerse en contacto con estas cosas que hoy nos hacen ruido, para poder abordarlas y comprender el por qué se repetían y naturalizaban ciertas cuestiones que tal vez hoy ni seríamos capaces de pensarlas de ese modo”.
Sin disfraces absurdos, ni cancelaciones
“No se puede disfrazar lo que pasó. Me parece que esto de prohibir o cambiar finales de historias no va; eso es faltar a la verdad. Si esto está hecho, si sucedió hay que mirarlo tal cual fue porque solo así uno puede empezar a hablar, discutir y sacar sus propios puntos de vista. Después de todo, de eso se trata la democracia”, añadió con énfasis el actor, al tiempo que puntualizó: “Me parece que el límite se lo tiene que poner cada uno. Lo que no podemos hacer nosotros es encorsetarnos, porque de hacerlo… ahí ya está, mejor que nos pongamos una verdulería. Acá es necesario a veces meter el dedo y joder, pero joder con una causa para que la cosa funcione haciéndonos preguntas”.
Para el final, el genial actor destacó el gran esfuerzo de los equipos de trabajo de arte, por estar en todos los detalles para mostrar en cada una de las escenas, escenarios de los 80 sin que se escape ningún detalle delator de un tiempo más cercano a la actualidad, lo cual constituyó todo un reto con bajo presupuesto.
Por último, y retomando el tema de sus proyectos, por afuera de esta ficción a punto de estrenarse, D´Elia compartió su entusiasmo por filmar en cine junto al gran director Damián Szifrón (Los simuladores, Relatos Salvajes, El fondo del mar), quien, según confesó el actor, se encuentra escribiendo una gran historia que podría ser filmada hacia octubre. En este contexto, respecto del premiado director de cine, D´Elia puntualizó: “Damián es un obsesivo. Lo llamé hace unos días para saber cómo iba con el trabajo, pero no me adelantó nada, solo que estaba dando forma al proyecto; sé de “esa forma” de trabajar que tiene, él es un obsesivo, por eso sus trabajos no tienen fisuras, lo cual responde mucho a la altura y trascendencia de sus obras”.
ATAV: Argentina, tierra de amor y venganza (segunda temporada)
Estreno: El lunes 22:15hs por canal trece.
Elenco: Federico D´Elia, Gloria Carrá, Juan Gil Navarro, Malena Solda, Rafael Ferro, Justina Bustos, el actor español Toni Gilabert, Nacho Di Marco, Andrea Rincón, y la gran actriz Virginia Lago, junto a un gran reparto de actores que conforman este prometedor equipo.