(CNN Radio Argentina) – Héctor Torres, ex representante argentino ante el Fondo Monetario Internacional (FMI), estableció en CNN Radio: “Si el fondo acepta dar los desembolsos de golpe, es para controlar una devaluación y no para evitarla”.
En este punto, el dirigente marcó: “El gobierno hubiera hecho bien devaluar mucho antes de que el Banco Central se quedara sin reservas porque devaluar sin reservas es siempre un riesgo muy grande”. Y adelantó que probablemente se anuncie alguna medida cambiaria, “como un desdoblamiento”.
De igual manera, Torres sentenció que ve “muy difícil” esa opción y que es más probable que el organismo estire las fechas de vencimiento.
“El acuerdo con el FMI no está caído y evidentemente hace falta modificarlo”, remarcó en CNN Primera Mañana, con Pepe Gil Vidal. Y sumó: “Seguramente el Fondo cambie las metas y el gobierno defina políticas fiscales y monetarias”.
En este sentido, Torres vinculó la falta de cumplimiento de las metas establecidas con la reciente sequía que azotó al país. Sin embargo, analizó: “Hay celos en el Fondo de que el Fondo esté tan expuesto tan reiteradamente a un país de ingresos medios y con tantos países que también necesitan apoyo”.
Geopolíticas y Nuevo Gobierno
Torres subrayó que China es el país más subrepresentado en el FMI, que apenas tiene el 6% de los votos y es el que engloba el 19% del producto mundial: “Hay un malestar en China e India respecto al manejo político. Los países occidentales tienen todavía el manejo del Fondo Monetario como en la época de la posguerra, pero el mundo ha cambiado”.
Es por eso que el ex representante argentino observó: “Estados Unidos tiene una gran influencia y, si bien China tiene menos votos, su influencia es muy importante. Lo que menos quiere el Fondo es que China se harte y cree su alternativa al Fondo Monetario. Las preocupaciones geopolíticas influyen en las posiciones que toman los países”.
Por otro lado, Torres descree que dolarizar la economía sea una solución: “Así como no existe en una economía enferma la moneda sea sana, tampoco se cura una economía enferma trayendo una moneda sana de otro país. No tengo confianza en esa propuesta, más allá de que su implementación sea difícil”.
Por último, recalcó que es “absolutamente deseable” que un nuevo gobierno rediscuta el acuerdo: “El fondo quiere hablar con un gobierno que se comprometa a implementar políticas por cuatro años. En este momento es difícil negociar algo”.