(CNN Radio Argentina)- Una nueva edición de la FED llegará próximamente. Esta vez la cita será en el complejo Art Media, del 3 al 6 de agosto. Para hablar de esto y de algunas cuestiones más, Aduana de palabras contactó al genial escritor quien nos dejó pensando (como ya es su costumbre) a propósito de ciertas dificultades que se vienen sucediendo en el amplio mundo literario. Por otra parte, el autor se refirió a su último trabajo que saldrá a la venta en solo dos días.
Este sábado por la tarde el programa de Mariana Mactas y Bobby Flores se puso en contacto a través del aire de CNN Radio con unos de los escritores, críticos e intelectuales más interesantes para profundizar y conocer de temas que van mucho más allá del horizonte de las historias escritas.
Es así que, Martín Kohan, habló de algunas situaciones que se han instalado (y que se vienen repitiendo hasta casi naturalizarse) como síntoma de un evidente desplazamiento de la importancia que hoy en día pareciera tener la crítica elaborada; ejercicio a través del cual es posible, cuando esta tiene su criterio, profundidad y abordaje, dar legitimidad a ciertos escritores y a determinados elementos del propio mundo literario.
En el principio de la entrevista Kohan se refirió a su entusiasmo por ser parte (nuevamente) de la próxima FED y comenzó recordando: “Estoy muy contento de volver a ser parte de esta Feria. La primera edición fue donde estaba “La Tribu”, y si miro para atrás, tengo el registro de que se trató de un hecho realmente desbordante en aquel momento. La verdad es que sempre el espacio donde esta feria se desarrolla, se queda chico”
¿Qué es lo que pasa que se ha generado esta vía de publicación en el marco del mercado literario?
“Ocurre que hay una cierta ecuación razonable entre calidad y rendimiento mercantil, que a menudo están bifurcadas, aunque no son irreconciliables; y esto también ocurre de manera muy parecida en otros mundos del arte como la música. No sé si se trata del rendimiento comercial que no da bien o es que las ganancias no se generan de la manera inmediata que se espera”.
“Lo cierto es que el tema de la ecuación esta, guarda relación con lo que sucede entre la rentabilidad y las apuestas literarias. Esa ecuación, que se podía financiar con un rendimiento inmediato, hoy creo que se fue diluyendo (como otras cosas). Y las editoriales independientes fueron ocupando ese espacio que fue quedando vacante; Eso hizo que hoy tal vez sea un negocio esto de estar haciendo una apuesta en este rubro”.
“El editor chico tiene injerencia en lo que sale a la venta o está ligado al movimiento del mercado?
“El caso que puedo traer para ejemplificar esto es el de Daniel Divinsky de Ediciones La Flor. En este sentido podemos poner la fe más fuerte en este sello, ya que Daniel lo que hizo fue apostar por algunas obras que pudieran sostener la inversión en otras. Vale decir, supo apoyarse en, por ejemplo, Mafalda (de Quino), para darle la posibilidad a otros autores con sus historias. Con esa misma estrategia hizo que pudiera, de repente, apostar por obras de figuras como Martín Caparrós y demás autores, que han podido sacar sus libros gracias a este tipo de modalidad”.
“Muchos de los que toman las decisiones en las grandes estructuras, casi nunca leyeron el libro del cual deciden qué hacer”
“No sé si todos los que pertenecen a las grandes estructuras del mercado editorial, cuando hacen sus reuniones para tomar decisiones a propósito de quien sacará un libro, han leído esa obra o saben de qué se trata el trabajo del autor; sin embargo, todos ahí opinan cómo será el diseño, cómo la portada y un montón de cuestiones más desde un lugar de muy poco conocimiento”.
“En verdad, casi siempre ocurre que ninguno de ellos leyó el libro que se va a editar. No es algo nuevo, pero sabemos que hoy, el lugar y la función de la crítica literaria, al igual que la figura del editor, están en crisis, como también está en crisis la legitimidad del lector”.
La opinión está muy valorada, y como gratis, es barata (pero a veces se paga caro)
“Siempre existió el que no leía, el que opina y no sabía y no sabe. Pero lo que ganó terreno es asistir a que esa opinión desplace el espacio de quienes estaban dispuestos a hacer una crítica o analizar una obra, poniendo en juego la lectura y el trabajo de análisis del texto. Incluso, con lectura de por medio, alguien hace una crítica y los términos en los que hace ese análisis puede hoy no ser una posición con fundamento”.
A título personal: “Desde la Boca”
“Mi libro no salió todavía y ya tiene dos comentarios. ¿Cómo ocurre eso si aún no lo leyeron? El tema es que parece no ser muy importante hablar o analizar un libro sin haberlo leído; Y lo que está en crisis es eso, porque siempre existieron los que hablaron sin saber”.
“Uno aprendió leyendo la crítica de gente que leía, estudiaba y se preparaba para eso, por eso creo que lo preocupante hoy es que haya dejado de ser importante estar preparado para hacer un análisis de una obra”.
“Desde la Boca” sale en estos días; Eso me tiene muy entusiasmado. Se trata de un ensayo para el que me convencieron porque yo siempre creí que no podía escribir sobre un sentimiento que, como en mi caso, uno tiene tan pegado a sí mismo. Porque para tomar distancia hay que dar un paso atrás (como hace el pintor con su obra), y yo no sabía si iba a poder hacerlo. Lo cierto es que, en definitiva, me persuadieron fuertemente, accedí y creo que salió”.
“Respecto de historias que hablaran de mi cuadro, leí varios libros. Por ejemplo, Boquita de Caparrós y otros”
“Este nuevo libro es una characterization ligada a la historia del club, del barrio; una especie de fenomenología del hincha de Boca. En mi caso yo no recibí el mandato de ser de Boca por cultura familiar del cuadro, lo adquirí y, en casos así, asimilas cuestiones que han ocurrido en la historia del club y las terminas asimilando aún sin haberlas vivido y presenciado; yo incluso puedo relatar los hechos que conozco, cuestiones que ha sucedido incluso antes de mi existencia en el mundo. No sé qué es lo que opera en esos casos, ni se como ocurre, pero yo siento que las viví, las presencié”.
En una cultura como la argentina, en donde sabemos de qué cuadro es el otro, siempre, es raro dar con alguien que no es de ningún equipo. Raramente te encontrás con alguien que no tiene equipo; si eso sucede, a mí me da la sensación de que estoy frente a una persona cuyos padres olvidaron de ponerle nombre”.
“Hay características de todos los hinchas, pero hay cosas muy particulares de los hinchas de Boca”
“En este caso hay un componente imaginario fuerte. Hay perfiles imaginarios de identidad y hay marcas diferenciales en todos los equipos. Yo creo que, si Maradona, que surge en Argentinos Juniors, hubiera pasado a jugar a River y luego al Milán, habría sido todo lo que fue como jugador, sin dudas; pero es indudable que una parte de todo lo que dimensionó su popularidad y su figura, es porque Diego jugó en Boca y en Nápoles, y eso no es un dato menor”.
“Hay un fenómeno muy notorio en estas cosas que denotan las cuestiones muy fuertes. Hay más para reflexionar en torno a esto. Por ejemplo: Decir que son “gallinas” es hasta algo decoroso, mientras que los “bosteros”, están detrás del término con una interpretación casi peyorativa; No obstante, nosotros lo henos sabido tomar, resignificar y hasta reivindicar”.