(CNN Radio Argentina) – Eugenio Mari, economista y jefe en la Fundación Libertad y Progreso, sentenció en CNN Radio respecto al nuevo índice de inflación, que fue para agosto del 12,4% y anualmente del 124%: “La inflación está desatada, Argentina pasó a un régimen inflacionario de dos dígitos”.
“Esto no pasaba desde marzo de 1991, el mes previo a que se instaurara la convertibilidad. En ese mes, Argentina tuvo 10,8% de inflación y veníamos de los coletazos de la segunda hiperinflación del país”, contextualizó Mari en CNN Primera Mañana, con Pepe Gil Vidal.
Y criticó: “Realmente es llamativo que volvamos a coquetear con esta situación de la inflación dada nuestra historia, con políticas fiscales irresponsables y que son regresivos a nivel social”.
Además puntualizó que la preocupación es mayor, ya que, según estimaciones, los precios corrieron al 4% en las primeras semanas de septiembre. Lo que da un IPC del 11% al 13%: “Eso se traslada al argentino de a pie, en menos poder adquisitivo, más distorsiones de precios, los mercados funcionando peor y sin referencias. Y obviamente que una economía que funciona peor, genera más pobreza”.
En este punto, Mari informó que el IPC se acerca “peligrosamente” al 15% y advirtió: “No hay shocks sobre el tipo de cambios o políticos y estamos coqueteando con la hiper. Si llega a pasar algo externo o algún shock, el IPC se acelerará más y ahí hablaríamos de un número de vértigo que puede estar cerca del 20% de inflación”.
Sin embargo, el economista resaltó que, a diferencia de 1991, Argentina cuenta con “una gra ventaja” y que es la expectativa de cambio de gobierno: “Hay expectativas de que la administración que viene será mejor, más razonable, que irá rápidamente al equilibrio fiscal, que saneará las cuentas públicas y eso es positivo. Eso genera un ancla que nos aleja de la hiperinflación”.
“Los fundamentos de la macroeconomía argentina están rotos, con un Banco Central quebrado, un Estado con déficit fiscal enorme y con inflación escondida abajo de la alfombra, con lo cual el próximo gobierno tendrá un enorme desafío por delante. Y deberá validar estas expectativas”, sumó.
Por último, Mari abogó: “Las empresas públicas en Argentina pierden más de 5 mil millones de dólares al año y las distorsiones de precios bancadas con subsidios no pueden continuar. Esas cosas hay que desmantelarlas rápidamente y enfocar el gasto en los sectores sociales más vulnerables y que necesitan que se mantenga ese apoyo”.
Y señaló en la necesidad de repensar el Estado Argentino: “Hoy tenemos un país con 18 ministerios y cientos de secretarías y subsecretarías. Si la política no lo puede resolver, la Argentina tiene destino de hiperinflación”.