(CNN Radio Argentina) – Guido Zack, director de Economía de FUNDAR, conversó este miércoles con CNN Radio sobre el trabajo económico de ‘Asignación de liquidez y política monetaria’ que realizó junto a Martín Guzmán, Fernando Morra y Ramiro Tosi.
“En esta publicación sostenemos que resolver el problema de las LELIQ es posible y para resolverlo no hace falta una medida discrecional y abrupta como un Plan Bonex. Descartamos que esa sea la solución para este problema”, comentó en Regreso CNN de Federico Seeber.
Para Zack, “todo evento compulsivo y sobre la deuda en pesos es contraproducente para la economía argentina porque vuelve a castigar a quienes ahorran en pesos. Nosotros queremos fortalecer la moneda y el camino para estabilizar y bajar la inflación, es con moneda propia. Cualquier medida compulsiva sobre la deuda en pesos, es contraria a la premisa que manejamos”.
“Las LELIQ son un problema porque generan un incentivo para que el mercado financiero, en lugar de hacer su actividad típica, genera el incentivo para que los bancos sean intermediarios entre los ahorristas y el Banco Central. Cada vez que un argentino pone un plazo fijo, el banco se da vuelta y le da ese dinero al Banco Central”, detalló.
El especialista sostuvo que “para revertir esta situación, lo primero es bajar la inflación. Para eso la consolidación fiscal es indispensable y que el Banco Central no financie más al Tesoro. Cuando el BCRA financia al Tesoro, son pesos que circulan en la economía y el Central termina absorbiendo con esos pasivos remunerados que son las LELIQ”.
“El Banco Central tiene que seguir existiendo. Hay que hacer un cambio con moneda propia, pero no se puede seguir como estamos ahora. No es una situación agradable la que vive la economía argentina y estar en contra de una dolarización no significa que no hay que hacer nada. Hay que tomar políticas responsables más graduales para cortar con la bola de LELIQ. Esta es una deuda que se puede asumir y no es necesario defaultearla”, explicó.
Según precisó Zack, “llevar la inflación a un dígito va a tardar muchísimo tiempo. Argentina necesita una política de shock en muchos aspectos de forma tal de bajar la inflación a los niveles que teníamos tiempo atrás”.
“Para esta política de shock es necesario una consolidación fiscal que elimine el financiamiento del Banco Central al Tesoro y un horizonte de unificación cambiaria porque una unificación de un día para el otro es muy inflacionaria y puede tener consecuencias sociales gravísimas”, concluyó.