Los candidatos presidenciales Álvaro Delgado (a la izquierda) y Yamandú Orsi (a la derecha) fueron los ganadores de las primarias para determinar candidatos para las elecciones presidenciales de octubre de 2024.

(CNN Radio Argenina) – Agustín Canzani, sociólogo y analista político uruguayo, se refirió a el ballotage que definirá el futuro presidente de Uruguay.

En CNN Primera Mañana afirmó que “las encuestas tuvieron un desempeño razonable, más allá de pequeños sesgos en la primera vuelta, y como la mayoría de los analistas anticipábamos, las encuestas están previendo un escenario disputado para la segunda vuelta”.

Aseguró que “todos los datos divulgados, hasta ahora, dan ventaja a Yamandú Orsi, el candidato del Frente Amplio, sobre Álvaro Delgado, que es el candidato de la coalición que está en el gobierno. Pero esas diferencias son pequeñas, están en el orden de entre uno y tres puntos y medio”.

Informó que “hoy se divulgarán las últimas, veremos las proyecciones, pero todo anticipa que lo que ocurra va a ser una definición que probablemente implique incluso que los resultados finales no se conozca hasta un par de días después”.

En diálogo con Pepe Gil Vidal, el analista uruguayo explicó que si “uno hiciera una aritmética simple y sumara el apoyo de todos esos electores, la coalición terminaría ganando por un porcentaje del orden de un 2,5 o 3 por ciento. Lo que están mostrando los estudios de opinión pública y lo que han mostrado otros eventos de segunda vuelta en Uruguay, es que a este bloque de centro derecha y derecha le cuesta un poco más que al bloque de centro izquierda alinear a sus votantes”.

Analizó que “ocurre porque ese bloque de derecha y centro derecha es de alguna manera un más heterogéneo, que integran dos grandes partidos y un par de partidos pequeños más, mientras que el otro bloque en realidad es un monobloque, es todo el Frente Amplio como tal”.

Agustín Canzani remarcó que “hasta ahora las diferencias han sido que en la segunda vuelta el bloque de Frente Amplio ha crecido entre un máximo de 8 puntos y medio y un mínimo de 5 puntos”.

Y concluyó que “con la experiencia de coalición de gobierno, se espera que ese crecimiento no sea tan alto, que la coalición tenga una capacidad mayor de retener votos, pero la clave está en ver hasta dónde asciende esa capacidad y si efectivamente eso le da para disputar o no la elección”.