(CNN Radio Argentina) – Daniel Artana, economista Jefe de la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas, se refirió al programa económico y el desafío de estabilidad cambiaria para el 2025.
En CNN Primera Mañana, aseguró que “el cierre del año nos encuentra mejor de lo que fue el cierre del año pasado. El gobierno actual heredó una situación muy compleja, con una inflación que estaba en el orden del 12% mensual, indicadores sociales muy malos, un deterioro del poder adquisitivo de los salarios y las jubilaciones muy importante, una economía que ya estaba en recesión a fines del año pasado y bueno, y eso después de un primer semestre bastante duro se ha revertido bastante, ha habido alguna recuperación parcial del terreno perdido en materia de ingresos, lo mismo con la actividad económica y claramente la tasa de inflación ha bajado a niveles de un poco más del 2% mensual”.
Consideró que “para el año que viene la inflación va a seguir bajando y la economía ya está en un proceso de recuperación modesto, pero recuperación al fin, así que creo que el año que viene, por lo menos en los indicadores macroeconómicos, va a ser mejor que este año, una economía en crecimiento en lugar de recesión”.
El economista afirmó que “bajar el crawling peg no me parece que esa sería la mejor decisión, teniendo en cuenta que estamos viviendo un shock externo negativo con la devaluación del gasoil y la caída en el precio de la soja y aún cuando mantuviéramos el crawling al 2% mensual, la inflación seguiría bajando igual, porque la economía por ahí, dado este shock, se está pidiendo un tipo de cambio real un poquito más despreciado”.
No obstante, consideró que “el gobierno va a bajar el ritmo del crawling peg, eso obviamente va a ayudar a que la inflación baje todavía más y la discusión acerca de si hay o no atraso cambiario, en el fondo es más académica, en los fines prácticos lo que importa es el gobierno tiene los dólares para aguantar el año 2025 y todo parece indicar que los tiene o tiene formas de conseguirlos”.
En diálogo con Pepe Gil Vidal, explicó que “el RIPO aparentemente se ha cerrado con los bancos, la posibilidad de pedirle más fondos al FMI y además recordemos que los exportadores el 20% de sus exportaciones, que son unos 1.500 millones de dólares por mes, los venden en los mercados alternativos. Así que hay muchas opciones con lo cual me parece que independientemente de la discusión de si la economía se está encareciendo en dólares o no, si esto genera algún dolor de cabeza o algún problema para algunos sectores industriales, el gobierno tiene la espalda como para poder bancar lo que decida hacer en materia de cambiaria”
Consultado sobre la corrección de los subsidios a los servicios públicos, Daniel Artanta afirmó que “vivíamos de una fantasía de que era que podíamos pagar la luz, el gas y otros servicios públicos a valores menores que los costos y que eso mágicamente no nos costaba. En realidad nos costaba porque la diferencia la terminaba pagando el Tesoro y como no tenía fondo le daba la maquinita y eso después lo pagábamos con inflación o si no lo terminábamos pagando a través de un deterioro en la calidad de los servicios”.
Agregó que la quita de parte de los subsidios “permitió reducir el impuesto inflacionario que nos afectaba a todos. Hoy eso ocurre a un ritmo mucho menor y entonces la impresión es que después de a poco la gente va a ir sintiendo. De hecho hemos tenido en el tercer trimestre una recuperación del consumo privado también comparando con niveles muy deprimidos”.
Sobre la estrategia cambiaria del gobierno, el economista de FIEL afirmó que “independientemente de la discusión de si hay o no atraso cambiario, parecería que el gobierno tiene los dólares como para hacer frente a todos los vencimientos y pagos que tiene que hacer en el año 2025, más allá de que el Banco Central tiene una posición todavía muy frágil de reservas, las metas siguen siendo negativas. Es cierto que la caída en el precio de la soja y la devaluación de Brasil nos van a costar un poco en términos de valor de las exportaciones, pero parecería que eso se puede aguantar y además la propia recuperación económica está haciendo rebotar las importaciones, pero el año que viene va a seguir habiendo un superávit comercial importante porque además hay algunos shocks positivos a las exportaciones, en particular en materia energética, pero hay una señal de alerta al precio de la soja y también ha caído un poco el petróleo. Recordemos que para nosotros eso antes que era una buena noticia es una mala noticia porque somos exportadores netos de energía”.