(CNNMéxico) — Nancy Lanza, madre del autor de la matanza en la que murieron 26 personas el viernes pasado en Connecticut, Estados Unidos, recibió cuatro disparos en la cabeza mientras dormía en su cama, aseguró este martes el jefe de peritos médicos, H. Wayne Carver.

Adam Lanza se mató después de un tiro en la frente con una pistola, detalló Carver.

Aún se esperan resultados de las pruebas toxicológicas para determinar si Lanza había tomado medicamentos.

Carver afirmó que, según le habían dicho, Adam Lanza tenía síndrome de Asperger, pero las autoridades aún tratan de determinar si se trata de un diagnóstico correcto y si podría haber tenido otros padecimientos.

Nancy criaba a un joven tranquilo y socialmente raro, el tipo de adolescente que podría permanecer en una esquina, dijo un excompañero de Lanza.

Incluso la mujer no se parecía mucho a su hijo. Ella era afable y extrorvertida, y fácilmente hacía amigos, según los testimonios.

Le gustaban las armas, pero ella se hacía responsable por ellas y sabía cómo manejarlas, dijo gente que la conoció.

La manera en que Adam tomó algunas de ellas para cometer una matanza en una escuela primaria aún está poco clara.

Las autoridades creen que mató a su madre previamente. Luego habría ido a la Escuela Primaria Sandy Hook, a la que alguna vez asistió, y mató a 20 niños y seis adultos, según la versión de las autoridades. Tras esto, habría usado una pistola para quitarse la vida.

Un amigo de Nancy Lanza, quien había hecho algunos trabajos domésticos para ella, dijo que estuvo en el lugar por última vez hace ocho meses y recuerda haber visto una caja con cerradura en el sótano, donde Lanza guardaba sus armas.

El hombre describió a Nancy como una chica campirana de New Hampshire que creció disparando. Él y la madre de Adam coincidieron parcialmente porque ambos tenían familiares con autismo, dijo.

En sus encuentros, Adam nunca estableció contacto visual ni se involucró en la charla, recordó el testigo.

Nancy Lanza trató duramente de introducir a su hijo a la vida pública, según el testigo, quien ahora se pregunta si ella habría presionado demasiado para hacerlo “encajar”.

Veinte niños de entre 6 y 7 años, y seis adultos más murieron el viernes pasado durante un tiroteo en la Escuela Primaria Sandy Hook, en Newtown, Connecticut. Las autoridades encontraron el cuerpo de Adam Lanza en uno de los salones cuando llegaron al lugar.

Las clases reiniciaron este martes en las escuelas de Newtown.

Con su sentido de la normalidad alterado por lo ocurrido en la primaria Sandy Hook, los estudiantes de otras escuelas regresaron a las aulas entre una mayor presencia de policías.

En tanto los profesores enfrentan un reto mayor. Platicarán con los jóvenes la tragedia en una forma apropiada para su edad, informó el sindicato de maestros.

Pero los alumnos de Sandy Hook no regresarán a clases, pues el lugar permanece como escena del crimen. Aún no se sabe cuándo se reanudarán las actividades en la primaria.

El incidente ha conmocionado a la sociedad estadounidense y ha reavivado el debate sobre el control de armas en el país.

El presidente Barack Obama se solidarizó con las familias de las víctimas durante una visita a Newtown el domingo pasado. “No están solos en este dolor”, dijo Obama a las víctimas.