Por Tom Cohen, CNN

Washington (CNN) – Con las encuestas mostrando apoyo a las nuevas legislaciones de control de armas, el presidente Barack Obama se reunió con funcionarios de su administración y víctimas de la violencia este jueves y aumentó la presión sobre el Congreso para que apruebe las reformas más de tres meses después de la masacre en una escuela de Newtown, Connecticut.

El presidente pidió al Congreso la aprobación de un paquete de leyes sobre armas en el Senado, argumentando que “ninguna de estas ideas debería ser controversial”.

También destacó que “algunas voces poderosas del otro lado” quieren retrasar las acciones sobre la legislación de armas. “Asumen que la gente se olvidará de esto”, dijo.

El acto en la Casa Blanca ocurre en lo que los impulsores de las restricciones a las armas llaman un día nacional de acción, que incluye marchas y manifestaciones en las principales ciudades del país.

La semana pasada, el grupo Alcaldes Contra las Armas Ilegales lanzó una campaña publicitaria de 12 millones de dólares dirigida a los miembros del Congreso en 10 estados para actuar en la legislación propuesta por los demócratas en el Senado y respaldada por el presidente.

El paquete incluye una expansión a las revisiones de antecedentes de compradores, leyes más duras contra el tráfico y las transacciones directas, y esfuerzos para mejorar la seguridad escolar.

Sin embargo, la oposición de la Asociación Nacional del Rifle (NRA, por sus siglas en inglés) y de los conservadores en el Congreso parece haber condenado otra propuesta que prohibiría armas de asalto semiautomáticas.

Obama y otros impulsores de controles de armas afirman que el ataque realizado en diciembre pasado por un solo agresor —que culminó con la muerte de 20 niños y seis adultos en la escuela Sandy Hook, en Newtown— mostró la necesidad de acciones contra la violencia por armas en el país.

También sostienen que Adam Lanza, el tirador de Newtown, usó un rifle semiautomático que hubiera estado prohibido bajo su propuesta. La medida también hubiera limitado los cargadores a 10 municiones cada uno.

Los opositores al endurecimiento de las leyes, liderados por la NRA, sostienen que la mayor parte de la violencia por armas se concentra en pistolas y en zonas urbanas, en vez de los rifles de asalto semiautomáticos criticados por los demócratas. Una mejor aplicación de las leyes existentes y la colocación a guardas armados en las escuelas serían remedios más efectivos, según la NRA.

El llamado de Obama coincide con la revelación de información sobre Adam Lanza. Los investigadores indicaron este jueves que el joven de 20 años tenía armas en una caja fuerte en su cuarto, y que en su casa fueron hallados más de 1.600 cartuchos.