Por Robyn Curnow
(CNN) — Nota del editorRobyn Curnow es la única periodista que ha visitado a Oscar Pistorius en la casa que comparte con su tío desde hace tres meses. Su tío y su agente también hablaron exclusivamente con Robyn.
PRETORIA, Sudáfrica (CNN) — Oscar Pistorius es un hombre destrozado que debe vivir con el hecho de que mató al amor de su vida, dijo su tío en una entrevista exclusiva con CNN.
Durante los últimos tres meses, el corredor con una doble amputación de piernas ha vivido en la casa de su tío Arnold en Pretoria, Sudáfrica. Ahora tiene barba porque no quiere ser reconocido y se ha rodeado de fotografías de Reeva Steenkamp, dice su tío.
Pistorius fue acusado de asesinar a la modelo de 29 años en las primeras horas del 14 de febrero. El próximo martes enfrentará una audiencia en la corte por el caso.
Arnold Pistorius describe el dolor del corredor como “impensable” y dice que se siente triste por su sobrino. “Tiene fotografías en su cuarto, fotografías por todas partes. Está confinado en casa, ya sabes. No sale a lugares públicos.
“¿Qué puedes decir si la persona que más amabas muere, y tú fuiste el instrumento? ¿Cómo te sentirías? Es impensable”.
Pistorius dice que la muerte de Steenkamp fue un accidente y que la confundió con un ladrón. El Estado dice que fue un asesinato. Aún no se ha establecido una fecha para el juicio.
El agente del corredor también habló por primera vez de una llamada que recibió a las 04:00 horas del 14 de febrero, en la que le informaron sobre el tiroteo en la casa de Pistorius.
“Era el inmueble en el que Oscar se quedaba, la hija del dueño del inmueble me llamó desde el teléfono de Oscar. Así que tomé el teléfono y vi que era el número de Oscar y pensé que era él quien me llamaba”, recuerda.
“Y solo escuché la voz de una chica que gritaba desesperadamente desde el otro lado, ‘por favor, tienes que venir aquí, tienes que venir a la casa de Oscar’”, contó Peet van Zyl a CNN.
“Primero pensé que le habían disparado a Oscar. Dijo, ‘no, no, no, no. Le dispararon a Reeva’. Entonces me explicó básicamente de forma breve lo que ocurrió. Y sí, fue un completo shock obviamente. Así que tuve que subirme al automóvil y dirigirme a Pretoria”.
Van Zyl dijo que después llamó a Ampie Louw, el entrenador del corredor, y le pidió que fuera a la casa de Pistorius.
“Cuando llegas a la casa y ves todos los automóviles de la policía y las luces… estaba parado afuera, con Peet y el abogado, pero Oscar estaba dentro”, dijo Louw a CNN.
“Podía escucharlo llorar en la cochera y Reeva estaba en la entrada. Así que fue terrible para mí”.
Pistorius hará una aparición breve el próximo martes en la Corte de Magistrados de Pretoria, que escuchará una moción de los fiscales del estado para posponer el caso para hacer más investigaciones. El juicio podría iniciar hasta principios de 2014.