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(CNNMéxico) — La tragedia por el descarrilamiento de un tren en Galicia, en el noroeste de España, impactó a las personas que estaban en la zona, quienes escucharon un estruendo y luego observaron los fierros retorcidos de los vagones.

“El tren se quebró a la mitad. Algunas piezas estaban arriba, algunas piezas estaban en el fondo”, dijo Ivette Rubiera Cabrera, de Florida, Estados Unidos, quien estaba de vacaciones con su familia en España, y pudo ver los restos del tren tras el accidente.

Rubiera Cabrera envió fotos a iReport de CNN, que tomó cuando pasó en automóvil cerca de la zona del accidente, camino a Santiago de Compostela.

“Fue muy impactante”, dijo. “Nunca habíamos visto algo así. Habíamos estado en el tren la semana pasada”.

Este miércoles murieron al menos 80 personas y 178 resultaron heridas, en el accidente ferroviario más grave de los últimos 40 años en España. Las autoridades aún investigan las causas.

“Estaba en casa, escuché un ruido muy fuerte y ya vi el humo… tardé sobre cinco minutos en llegar al lugar donde el tren se accidentó”, contó a CNNMéxico Luis, residente de Angrois, el lugar donde se produjo el accidente, en las inmediaciones de Santiago de Compostela.

“Había gente muerta, gente gritando de dolor”, relató un hombre que llego casi inmediatamente después del impacto, entrevistado por la agencia Atlas, afiliada de CNN.

Otro dijo que el impacto fue tan fuerte que provocó que su auto temblara. Luego vio a personas sacando a pasajeros, mientras los conductores de otros autos se detenían para ayudar o llevar sábanas y agua al lugar.

“No hay palabras para lo que vi… estaba traumatizado”, dijo.

Después del accidente se podían observar cuatro vagones volcados, y alrededor vehículos de los bomberos y la policía, dijo a CNNMéxico María Pampín, residente en Santiago de Compostela.

También se formó una cadena humana para sacar a los cuerpos.

Videos tomados en el lugar mostraban a rescatistas usando una tabla de madera para cargar un cadáver cubierto con una sábana, que más tarde fue colocado en un campo adyacente en el suelo. La tabla fue reusada con otro cuerpo.

Una grúa al costado de los fierros retorcidos de un vagón removía escombros. Mientras, las autoridades realizaban labores para identificar víctimas, contó María.

Francisco Otero, de 39 años, contó a la agencia AFP que llegó al lugar del accidente “al cabo de un minuto”.

“Estaba viendo la televisión en casa de mis padres y se escuchó como un gran estruendo. Como si hubiera habido un terremoto”.

“Aquello parecía irreal”, agregó. “Los vecinos intentaron sacar a la gente atrapada, con picos, mazas y al final los sacaron con una sierra manual”.

Un testigo que viajaba en el tren dijo a Cadena SER que “parece ser que en una curva el tren empezó a dar vueltas, vueltas de campana, dimos muchas vueltas de campana y quedaron subidos unos vagones encima de otros”, según AFP.

Testigos mencionaron a la agencia EFE que el convoy se partió en dos, y la máquina y los cuatro primeros vagones descarrilaron, otro intermedio voló sobre un terraplén de casi cinco metros de altura, hasta caer muy cerca de las viviendas, y el resto volcó.

El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, dijo en un mensaje televisado este jueves que se llevan a cabo dos investigaciones coordinadas: una judicial y otra por parte de una comisión del Ministerio de Fomento, para conocer las causas del siniestro.

Rajoy informó que se decretará tres días de luto por el incidente. “Para un santiagués como yo, hoy es el Día del Apóstol más triste de mi vida”, indicó.

Con información de Daen Ascensión y Mariano Castillo