(CNN Español) – El Departamento de Estado de EE.UU. declaró a tres funcionarios venezolanos como personas no gratas y les dio un plazo de 48 horas para salir del país.
Uno de ellos es Calixto Ortega, encargado de Negocios de Venezuela en Estados Unidos.
“En respuesta a la decisión de Gobierno de Venezuela de declarar a tres funcionarios estadounidenses de nuestra embajada en Caracas, el encargado de negocios de Venezuela en EE.UU. Calixto Ortega fue notificado que —en concordancia con la convención de relaciones diplomáticas de Viena y el articulo 23 de la convención de Viena sobre relaciones consulares— ha declarado a Ortega, a la segunda secretaria Mónica Alejandra Sánchez Morales de la embajada en Washington y a la cónsul en Houston Marisol Gutierrez de Almeida como personae non gratae. Tienen 48 horas para irse de EE.UU.”, dijo la portavoz del Departamento de Estado.
Según dijo la portavoz, las convenciones mencionadas le permiten a Estados Unidos declarar a cualquier miembro de una misión diplomática o puesto consular como ‘persona no grata’ en cualquier momento y sin la necesidad de dar una razón.
“Es lamentable que el gobierno venezolano haya de nuevo decidido expulsar funcionarios diplomáticos con base en versiones infundadas”, dijo la portavoz. Por tanto, el Departamento de Estado decidió “acción recíproca”.
“Es contraproducente para los intereses de nuestros países y no es una manera seria para que un país conduzca su política exterior”.
Kelly Keiderling, diplomática estadounidense expulsada por el Gobierno de Venezuela y acusada de participación en un sabotaje contra el sistema eléctrico, dijo que sus labores correspondieron a una actividad “común y corriente” del trabajo diplomático para entender a fondo al país.
La funcionaria fue expulsada del país junto a otros dos empleados estadounidenses, por orden del presidente Nicolás Maduro.
Maduro culpó a los diplomáticos por los cortes eléctricos que afectaron al país en septiembre y los acusó de conspirar con sus opositores políticos de un sabotaje al sistema energético del país.
Keiderling, encargada de Negocios de la embajada de EE.UU. en Venezuela, agregó que “el diplomático no se debe limitar solamente a un intercambio con el Gobierno —por importante que sea— sino ir un poco más allá y entender de qué se trata el país y cuáles son las aspiraciones de su pueblo”.
“Es el trabajo común y corriente de los países que tienen representación diplomática de salir a entender el país”.
Por eso, dijo, los funcionarios conocen a los “líderes del mundo político, económico, empresarial, cultural, académico, de medios de prensa. Eso es el trabajo de la diplomacia”.
“Igual que hacen los diplomáticos venezolanos en Washington”.
“El presidente Maduro mismo reconoció la importancia de esos acercamientos”, dijo Keiderling, haciendo referencia a los presuntos planes de Maduro durante su visita a Nueva York.
El departamento de Estado de EE.UU.rechazó las acusaciones de Maduro. Jen Paski, portavoz del organismo, dijo que su país analiza qué medidas tomar y no descarta “acciones recíprocas”.