(CNN Español) – Pablo Neruda no fue envenenado.
Así lo determinaron los expertos chilenos que examinaron los restos del poeta, quienes descartaron que fuera envenenado tras el golpe militar de 1973 encabezado por Augusto Pinochet.
Según las autoridades, los exámenes revelaron la ausencia de “agentes químicos relevantes” y confirmaron la presencia de sustancias farmacéuticas para tratar el cáncer de próstata que padecía y que se aceptó como la causa de su muerte.
Neruda, premio Nobel de Literatura, falleció el 23 de septiembre de 1973.
Su cuerpo fue exhumado en abril de su tumba en la Isla Negra.
Las pericias se iniciaron luego que el conductor del poeta declarara en 2011 que Neruda murió de una inyección aplicada por agentes de Pinochet en la clínica donde recibía atención medica.
Un juez chileno admitió que aun existe la posibilidad de que Neruda fuese asesinado de otra forma, por lo que la causa seguirá abierta.
Uno de los toxicólogos que participaron en el estudio reconoció que existe la posibilidad de que Neruda hubiese sido atacado con agentes químicos o biológicos, como el gas sarín o la toxina botulínica, pero estas sustancias desaparecen rápidamente del organismo y resulta imposible comprobarlo.