Por Michael Pearson y Kyung Lah, CNN
(CNN) – Es conocido como “el millonario sin rostro”.
Y los funcionarios de Corea del Sur al parecer tienen algunas preguntas que hacerle.
Yoo Byung-un —hombre de negocios, artista, exconvicto y una figura religiosa— no parece tener un interés financiero directo en la Cheonghaejin Marine Co, la empresa que administra el Sewol, el ferry que se hundió en Corea del Sur.
Pero los medios de comunicación de Corea del Sur han reportado que controla la empresa a través de dos de sus hijos, que poseen participaciones en la empresa a través de filiales.
Aliados de Yoo niegan rotundamente su participación. Un comunicado emitido el viernes por una agencia de relaciones públicas que representa a Yoo insiste en que él no tiene nada que ver con ninguna empresa vinculada a la catástrofe del transbordador.
Michael Cam, director gerente de Ahae Press, dijo que sabe que Yoo “ha pasado todos los días de los últimos cuatro o cinco años centrado en su trabajo de fotografía, “y no a dirigir ninguna empresa vinculada al ferry hundido.
“Estoy consternado por los informes de los medios que lo vinculan con el incidente del Sewol y que sugieren que él es directamente responsable de esta tragedia”, dijo Ham. “Estas afirmaciones no pueden estar más lejos de la verdad”.
Las autoridades registraron la casa de Yoo esta semana, además de oficinas de la compañía propietaria del barco, los fiscales dijeron a CNN.
Los investigadores también han investigado a 20 de los socios del dueño del barco y una organización religiosa ligada a Yoo, según la Agencia semioficial de noticias Yonhap.
El grupo religioso y una organización privada que lleva a cabo investigaciones en seguridad de buques, también se enfrentan a las sospechas de tener alguna relación con en el desastre, informó Yonhap.
Los fiscales están buscando pruebas de irregularidades que podrían haber contribuido al desastre Sewol.
Cómo Yoo encaja en ese cuadro sigue sin estar muy claro.
Poco se sabe oficialmente de Yoo, quien se ganó el apodo de “el millonario sin cara” al hacer algunas apariciones públicas.
Fue declarado culpable por cargos de fraude en la década de 1990 y pasó cuatro años en prisión por evasión de impuestos. También dirigió una compañía de ferries ya desaparecida que operó en el río Han.
Ahora se cree que está involucrado con la Iglesia Evangélica Bautista, un grupo religioso de Corea, fundado por su padre, que ahora cuenta con 20.000 miembros, según Yonhap.
Más recientemente, él asumió una nueva identidad como fotógrafo y artista que se conoce con el nombre de AHAE. El comunicado de prensa del viernes indica que su trabajo ha sido expuesto en el Museo del Louvre y en el Palacio de Versalles.
Una biografía en su web Ahae.com describe Ahae como el presidente de 123 Farm, una granja de lavanda orgánica sobre la base de la Highland Springs Resort en California.En 2006 un artículo de Los Angeles Times incluía a Yoo como presidente de la junta de una compañía de Corea del Sur que posee el complejo.
La biografía también describe a Ahae como un empresario que diseñó los barcos que viajaban al río Han.
Fiel a apodo de Yoo, Ahae no muestra su rostro en el sitio web. Él sólo aparece de espaldas, fotografiando escenas de la naturaleza como si fuera su marca de estilo - por una ventana de su estudio de Corea del Sur.
Según el sitio web, Ahae nació en 1941 en Japón, donde su familia estuvo durante el dominio colonial japonés de Corea. Eso lo convertiría en una persona de 72 o 73 años.
La biografía describe a Ahae como “un inventor, empresario, filántropo, activista ambiental, artista marcial, pintor, escultor, poeta y fotógrafo”.
Él también tiene interés en la agricultura. Además de la granja de la lavanda California, Ahae supervisa dos plantaciones de té orgánico en Corea del Sur, según la biografía.
“Ahae ha sido un conservacionista toda su vida y ha hecho todo lo que esté a su alcance para asegurarse de que sus actividades comerciales no entren en conflicto con sus esfuerzos para mantener la pureza del mundo natural”, se lee en la biografía. “Su enfoque en los productos ecológicos es una extensión natural de su preocupación por el medio ambiente, y el individuo en particular”.