(CNNMéxico) — Un día después de la abdicación del rey Juan Carlos de España, permanece la duda sobre cuándo se proclamará a su hijo Felipe de Asturias como sucesor. En tanto, el monarca saliente y su heredero se mostraron por primera vez en público en las afueras de Madrid.
El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, convocó para este martes una reunión extraordinaria del Consejo de Ministros para aprobar la ley orgánica que regulará la abdicación del rey y que será enviada de inmediato al Parlamento.
“Las abdicaciones y renuncias y cualquier duda de hecho o de derecho que ocurra en el orden de sucesión a la corona se resolverán por una ley orgánica”, señala el artículo 57.5 de la Constitución.
Esa ley no se aprobó desde que la Constitución ha estado vigente, por ello, debe hacerlo este martes el actual gobierno.
Opinión: Don Juan Carlos, un rey cansado
En declaraciones en los pasillos de la Cámara Baja, el presidente del Congreso español, Jesús Posada, prevé que la proclamación de Felipe VI pueda celebrarse a partir del 18 de junio, fecha en que ya estaría aprobada la ley orgánica, citó la agencia española EFE.
“Yo creo que para el día 18 puede estar todo resuelto para que se haga la proclamación solemne del rey en las Cortes. Pero esa decisión no me compete. Hablaremos con la Casa Real y con el dobierno”, según lo recogido por EFE.
Posada explicó que sus planes son que la ley sobre la sucesión a la corona que aprobará este martes el Consejo de Ministros pueda recibir el visto bueno del Congreso la próxima semana y que el Senado haga lo propio a la semana siguiente.
Todo apunta a que el pleno de la Cámara Baja que se convoque al efecto, tramitará la norma en lectura única —el trámite más rápido— y, posteriormente, será enviada al Senado, de acuerdo con la agencia.
Tras su aprobación parlamentaria será publicada en el Boletín Oficial del Estado, momento en el que será efectiva la abdicación del rey Juan Carlos y se celebrará en el Congreso el acto de coronación de Felipe VI.
Antes de que ocurra esto, el rey Juan Carlos y el príncipe de Asturias asistieron a un acto oficial juntos por primera vez después de que el monarca anunciara su abdicación.
Vestidos con uniforme militar, Juan Carlos y Felipe de Borbón estuvieron en el Monasterio de San Lorenzo de El Escorial (Madrid), donde el rey presidió la ceremonia militar de la Orden de San Hermenegildo, creada hace dos siglos para premiar conductas militares ejemplares.
Sin embargo, tras esta apariencia de normalidad la monarquía se enfrenta ahora a un difícil desafío, con un país asfixiado por la crisis económica, las tensiones políticas con independentistas catalanes y vascos y cuya ciudadanía, indignada por los múltiples escándalos de corrupción, pierde confianza en las instituciones al tiempo que aumentan los partidarios de un retorno a la república, según un reporte de AFP.
El lunes por la noche se registraron varias manifestaciones en los que se reclamaron “No más reyes, referéndum”, “Los Borbones, a las elecciones”. Con la bandera roja, oro y violeta de la Segunda República (1931-1939), miles de personas salieron el lunes por la noche a las calles de todo el país para pedir que España decida por consulta popular el futuro de la monarquía.