Por Osmary Hernández, CNN

(CNN Español) – Comprar una nevera, lavadora o televisor en Venezuela no solo requiere una inversión de dinero sino también de tiempo.

Se trata de productos baratos cuyos precios fueron fijados por el gobierno y que se venden en comercios tanto oficialistas como privados.

Para disfrutar de esos precios especiales en electrodomésticos y línea blanca, las personas deben hacer largas filas, no solo por horas sino hasta por varios días.

La escena de personas a la espera del inicio de las ventas frente a los establecimientos comerciales recuerda lo ocurrido hace un año con la cadena de electrodomésticos Daka. En 2013 se conoció como ‘Dakazo’ el proceso en el cual el gobierno ordenó a varios comercios, comenzando por la cadena de tiendas Daka, bajar los precios, ante lo cual cientos de personas se volcaron hacia esos locales para aprovechar las rebajas.

Días y noches en filas

Cesar Hernández suma ya dos noches durmiendo frente a la sede de Daka en Bello Monte, en el este de Caracas. Asegura que en su caso es una emergencia pues hace tres meses que su nevera dejó de funcionar.

Desde entonces, le pide ayuda a una vecina con la que tiene una amistad de 40 años para guardar carne, pollo y algunas verduras.

Hernández asegura que no quiere seguir abusando de la hospitalidad y que lleva todo este tiempo buscando sin éxito.

La única opción que consiguió escapaba de su bolsillo: el equivalente a 5.200 dólares calculados a la tasa oficial más alta en este país con control de cambio.

Otros, como Alejandro Suárez, aseguran que para personas como él la oportunidad de comprar es en esta época, cuando llegan los bonos especiales de fin de año otorgados por ley.

Suárez dice que quienes como él ganan el sueldo mínimo, la única forma de comprar es aprovechar las ofertas. El precio es soportar la espera y el desorden en las colas.

Es una opinión que comparte María Pacheco, una ama de casa que dejó de lado por unos días las labores del hogar para sumarse a las filas con la esperanza de comprar barato.

Pacheco destaca que no solo es el tiempo perdido sino el riesgo de la propia vida cuando se trata de pasar la noche en la calle en uno de los países más peligrosos de la región.

La mujer agrega que no considera justa esta situación y que en estas condiciones difícilmente se puede pasar una Navidad Feliz, nombre que identifica el plan del gobierno de inspeccionar los comercios para garantizar que no se excedan con los precios.

Al mismo tiempo, Magaly Herrera, en su segundo día de espera, pide paciencia y mantener el orden al tiempo que agradece al gobierno la oportunidad tener precios justos que, asegura, le permitirán tener acceso al combo del programa gubernamental “Mi casa bien equipada”.

Este kit incluye nevera, lavadora y aire acondicionado por el equivalente a 660 dólares, calculados a la tasa oficial mas alta.

“Navidades felices”

La Superintendencia de Precios Justos, en el marco del plan oficial “Navidades felices”, supervisa que los montos de venta sean razonables en distintos rubros, entre ellos línea blanca y electrodomésticos. 

Este tipo de productos son vendidos por el Gobierno a precios más bajos que en comercios como parte del programa “Mi casa bien equipada” y ahora también en establecimientos privados a los que se les otorga un cambio de divisas favorable.

La ministra de Comercio, Isabel Delgado, asegura que hay suficientes productos para satisfacer las necesidades de los hogares venezolanos.

Ante las largas colas, la alta funcionaria había propuesto generar un sistema de citas. Sin embargo, de momento las colas persisten tanto en comercio oficiales como privados.

La oposición denuncia que deben establecerse prioridades en las importaciones. El miembro de la directiva del partido Voluntad Popular, Luis Florido, asegura que en un país donde no se consigue acetaminofén, los puertos venezolanos estan llenos de containers de equipos Samsung, de whisky 12 años y muñecas Barbie.

El control de precios surge en momentos en que la inflación al mes de agosto se ubicó en 39 %, según el Banco Central de Venezuela.

LEE: Gobierno de Venezuela reduce seis veces el precio de la muñeca Barbie