(CNN) – El gobierno de Brasil, que se ha visto afectado por una profunda recesión y por la pandemia del virus del Zika, ahora solo está luchando por sobrevivir.
La última crisis comenzó cuando la policía federal detuvo al expresidente Luiz Inacio Lula da Silva para interrogarlo como parte de una investigación de corrupción que se ha estado llevando a cabo durante mucho tiempo.
Unos cuantos días después, la persona a quien seleccionó cuidadosamente y su protegida, la presidenta Dilma Rouseff, lo nombró jefe de gabinete, una medida que lo protege en gran parte del proceso judicial. Esto provocó grandes protestas callejeras. Ha surgido una batalla legal para tratar de bloquear el nombramiento de Lula, mientras los esfuerzos por impugnar a la presidenta han ganado impulso.
He aquí algunas preguntas y respuestas acerca de la tormenta que azota al país más grande de Sudamérica:
¿Qué es Petrobras y la ‘Operación Lava Jato’?
El problema realmente empezó en marzo de 2014, cuando el partido de Rousseff se vio envuelto en una investigación de lavado de dinero en Petrobras, la empresa petrolera estatal de Brasil.
La investigación apodada “Lava Jato” (lavado a presión) en referencia a los servicios de lavado en las gasolineras, destapó una operación de soborno generalizada.
Funcionaba de la siguiente manera:
Las empresas de construcción pagaban grandes sobornos a los ejecutivos de Petrobras y a políticos a cambio de contratos lucrativos. La investigación ha envuelto a docenas de los principales líderes de empresas y políticos… muchos, pero no todos, pertenecían al Partido de los Trabajadores que se encuentra en el poder. Muchos de los que han sido acusados han accedido a testificar para el estado, lo que ha dado lugar a una mayor lista de sospechosos. La operación Lava Jato aún está en marcha, ha tenido casi 30 subinvestigaciones individuales y más de 100 arrestos.
Vale la pena mencionar que Rouseff fue la directora de la junta de Petrobras de 2003 a 2010, cuando salió para postularse a la presidencia. No ha sido implicada en la investigación y dice que ella no estaba al tanto de la corrupción.
¿Cómo queda Lula da Silva en todo esto?
Anteriormente este mes, la policía federal de la investigación “Lava Jato” hizo una redada en casa de Lula da Silva y lo interrogó debido a las sospechas de que él se había beneficiado de la estructura de sobornos de Petrobras. Al mismo tiempo, los fiscales en un caso distinto pusieron al expresidente que una vez fuera una figura popular bajo investigación de manera formal por cargos de lavado de dinero que lo vinculaban con compañías de construcción nombradas en el cartel de ofertas de Petrobras.
OAS, Odebrecht, Camargo Correa y otros hicieron grandes donaciones para su ONG, el Instituto Lula, y pagaron por lujosas renovaciones en dos propiedades —una casa de campo y una propiedad frente a la playa en Guaruja, en el estado de Sao Paulo— que los investigadores sospechan que en realidad pertenecían a Lula da Silva
El Instituto Lula dice que Lula da Silva no es el dueño de ninguna de las propiedades, pero fue visto inspeccionando el apartamento tríplex en 2014, y la casa de campo está registrada a nombre de dos colegas del hijo de Lula da Silva.
El polémico nombramiento de Lula da Silva como jefe de gabinete implicaría que solo la Corte Suprema de Brasil podría tomar el caso en su contra, un proceso que podría tardar meses, si no es que años.
En las llamadas telefónicas grabadas que fueron hechas públicas, Rousseff y Lula da Silva hablan sobre enviarle un documento de formalización de su nombramiento como jefe de gabinete… algo que podría ser usado “de ser necesario”. Esto está siendo interpretado por los críticos en el sentido de que podía usar los documentos para evitar ir a prisión.
La medida, que los miembros de la oposición consideran que es una medida política, ha sido defendida por el mismo Lula da Silva. En una protesta reciente a favor del gobierno, él se presentó en persona y dijo, “iré ahí a ayudar a la presidenta Dilma para que haga las cosas que necesita hacer en este país”.
¿Por qué protestan las personas?
Son dos los grupos que protestan, y ellos tienen ideologías distintas.
Por un amplio margen, el más grande es el grupo que está a favor de la impugnación. Ellos protestan contra la corrupción desenfrenada que afecta al gobierno del Partido de los Trabajadores y a otros partidos. “¡Renuncia ya!” es una consigna popular dirigida a Rousseff.
Ellos impulsan a los legisladores a que sigan adelante con los procesos de impugnación. Estos manifestantes lucen los colores de la bandera del país, amarillo y verde, y las camisetas del equipo de fútbol brasileño. Muñecos inflables de Rousseff y Lula da Silva que llevan puesto un uniforme de prisión son elementos que no faltan en estas manifestaciones.
Otro grupo está manifestando en apoyo del Partido de los Trabajadores, de Lula da Silva y Rousseff.
Dicen que están en defensa de la democracia y gritan “No aceptaremos un golpe de estado”, en referencia a los numerosos intentos para que Rousseff deje el cargo… desde presionarla para que renuncie hasta los procesos de impugnación que dicen, no tienen fundamento.
Son rápidos para recordar el golpe de estado en 1964, cuando el gobierno de izquierda del país fue derrocado y reemplazado por una dictadura militar que siguió durante 20 años Estos manifestantes tienen una fuerte base de unión y han estado usando el color rojo brillante, el color del Partido de los Trabajadores.
¿Rousseff será obligada a dejar el cargo?
Ahora que las protestas populares están ganando impulso, la cámara baja del Congreso se adelantó con un procedimiento de juicio político que había estado pendiente.
El proceso inició en diciembre, ha sido aceptado por la cámara baja del Congreso, y un comité de 65 miembros ya había sido formado para analizar la solicitud de impugnación. Se presentaron muchas solicitudes de impugnación, pero la única que el Congreso aceptó afirma que Rousseff violó la ley de presupuesto porque ella usó trucos contables para ocultar un gran déficit a fin de ganar la reelección en 2014. La solicitud de impugnación no está vinculada con las investigaciones de corrupción.
Roussseff tendrá diez sesiones para presentar su defensa, y la cámara baja necesitaría una mayoría de dos terceras partes para aprobar la impugnación. Si Rousseff es impugnada, el vicepresidente Michel Temer asumiría la presidencia hasta las nuevas elecciones en 2018.
¿Afectará esto a los Juegos Olímpicos?
Muchos factores estarán en contra de Brasil este verano:
–Las protestas aún podrían estar sacudiendo al país en agosto.
- Hubo 1,5 millones de casos de Zika en el 2015.
– Las aguas contaminadas en los sitios de los Juegos Olímpicos de Verano sigue siendo una preocupación.
No sorprende que la agitación política ha afectado profundamente la economía brasileña, lo que aunado a una profunda recesión, ha dado lugar a que se vendan menos de la mitad de los boletos para los eventos de los Juegos de Verano. Los organizadores esperaban que los brasileños compraran más, pero ellos se han visto muy afectados por los problemas económicos.
Después que se filtrara la conversación entre Rousseff y Lula da Silva, los mercados financieros de Brasil respondieron inmediatamente con un salto, ya que los analistas creen que la impugnación de Rousseff ayudaría a recobrar la confianza de los inversionistas en la maltrecha economía del país.