(CNN) – El exprisionero de Corea del Norte y estudiante universitario estadounidense Otto Warmbier murió este lunes según un comunicado de su familia. Tenía una “grave lesión neurológica”, según el Centro Médico de la Universidad de Cincinnati.
Falleció en ese centro médico a las 2:20 pm rodeado de su familia.
La semana pasada fue puesto en libertad después de más de 17 meses de detención en Corea del Norte. Estuvo en coma durante más de un año, según sus padres.
El gobierno norcoreano dijo que el botulismo fue el culpable de la enfermedad de Warmbier, pero los médicos estadounidenses dijeron que no encontraron evidencia de la enfermedad.
La familia expresó ira por el trato hacia el joven en Corea del Norte.
“Queremos agradecer a los maravillosos profesionales del Centro Médico de la Universidad de Cincinnati que hicieron todo lo que pudieron por Otto. Desgraciadamente, el terrible y toruoso maltrato que nuestro hijo recibió de manos de los norcoreanos aseguró que ningún otro resultado fuera posible más allá del triste resultado que hoy sufrimos”.
La reacción de Trump
El presidente de EE.UU. Donald Trump expresó su rechazo el lunes a la muerte Warmbier, asegurando que muchas cosas malas le sucedieron al estudiante mientras estaba detenido en Corea del Norte.
Trump llamó a Corea del Norte un “régimen brutal” y dijo que Warmbier enfrentó condiciones difíciles cuando estuvo detenido allí.
El mandatario hizo los comentarios durante un evento con presidentes de compañías de tecnología en la Casa Blanca.
La familia no cree en la versión norcoreana
La familia Warmbier no cree en la explicación de Corea del Norte de que el joven de 22 años entró en coma después de contraer botulismo y tomar una píldora para dormir poco después de ser sentenciado en marzo de 2016, dijo este jueves a los reporteros el padre de Warmbier.
“Incluso si usted cree que su explicación del botulismo y una píldora para dormir causan un coma —y no lo hacemos— no hay excusa para que cualquier nación civilizada haya mantenido su condición en secreto y le haya negado atención médica por tanto tiempo”, dijo la semana pasada Fred Warmbier durante una conferencia de prensa en la Escuela Secundaria de Wyoming, en el sur de Ohio, donde Otto se había graduado.
Warmbier fue detenido en enero de 2016 en el aeropuerto de Pyongyang mientras regresaba a su casa. Sus padres dicen que el estudiante de la Universidad de Virginia había estado en una gira por el país asiático.
Las autoridades norcoreanas dijeron que tenían imágenes de seguridad de él tratando de robar una pancarta que contenía un lema político que estaba colgada en las paredes de su hotel en Pyongyang.
Esto fue utilizado como prueba en su juicio de una hora, durante el cual Corea del Norte lo acusó de cometer “actos hostiles” contra el régimen instado por un presunto miembro de una iglesia en su estado natal de Ohio, una organización universitaria secreta y la CIA.
Warmbier fue declarado culpable y sentenciado en marzo de 2016 a 15 años de trabajos forzados. Fue la última vez que lo vieron en público.
Críticas a Obama
Fred Warmbier se mostró crítico con el manejo que hizo el gobierno de Obama de la detención de su hijo en enero de 2016, diciendo que la familia escuchó el consejo del gobierno estadounidense de tomar un perfil bajo “sin resultados”.
En contraste, elogió los esfuerzos del gobierno de Trump: “Ellos tienen nuestro agradecimiento por traer a Otto a casa”.
Cuando se le preguntó si el presidente Obama podría haber hecho más, Fred Warmbier respondió: “Creo que los resultados hablan por sí mismos”.
Fred Warmbier pidió a Corea del Norte que libere a otros detenidos estadounidenses.
“No hay excusa por la forma en la que los norcoreanos trataron a nuestro hijo, y no hay excusa por la forma en que han tratado a tantos otros, les pido que liberen a los otros estadounidenses detenidos”, dijo. “Ninguna otra familia debería tener que soportar lo que tienen los Warmbiers”.