(CNN Español) – ¿Podrían haber estado involucrados en la muerte del Che Guevara los servicios secretos de la KGB de la Unión Soviética? Eso se pregunta Juan Martín Guevara, el hermano de Ernesto el ‘Che’ Guevara de la Serna, quien en una entrevista exclusiva con CNN en Español —tras la reciente publicación de su libro Mi hermano el Che— habló sobre aspectos íntimos del líder revolucionario quien cumpliría 89 años este año.
“Es probable que haya participado la KGB, los servicios de inteligencia de la Unión Soviética. ¿Por qué? Porque la Unión Soviética tenía públicamente una política absolutamente opuesta al desarrollo de la revolución de América Latina”, dice el hermano menor de Che Guevara.
Es una posición que Juan Martín Guevara sostiene en su libro pero asegura que no tiene evidencias. También Guevara duda de que Fidel Castro fuera responsable de la muerte de su hermano, hipótesis del exagente de inteligencia de EE.UU. Félix Rodríguez, quien confesó a CNN en octubre de 2013 que Fidel tomó una serie de medidas para eliminar al revolucionario argentino.
“Que Fidel lo traicionó o Fidel se lo sacó de encima o el Che le hacía sombra o todo esto…. no es una ingenuidad: es una posición política e ideológica que en aquel momento y todavía tiene vigencia”, dice Juan Martín Guevara.
Un camino difícil
Juan Martín Guevara habló con emoción desde su casa en la ciudad de Buenos Aires porque recientemente publicó su libro Mi Hermano el Che, escrito junto a la escritora francesa Armelle Vincent, publicado también en francés. El libro del hermano menor del Che es un intento de contar la vida del Che desde una mirada íntima y privilegiada de uno de los hombres más conocidos de la historia contemporánea.
Se han escrito muchos libros sobre el Che Guevara, pero esta historia ha quebrado el silencio de la familia para contar con las características de la familia, incluyendo el sufrimiento de los Guevara por la portación del apellido durante la dictadura militar.
Como explica Juan Martín Guevara a CNN, su idea fue humanizar al Che, desmitificarlo para que las personas, tanto los admiradores como los detractores lo conocieran.
“La imagen de él es una imagen muy conocida en el mundo … entonces él humanizarlo hace posible que la gente se acerque a la persona, al humano y no al mito. El mito es muy difícil de alcanzar está allá arriba, lejano,” explica Juan Martín.
La decisión de contar la historia de su hermano en un libro le tomó varias décadas y fue un camino casi tan difícil como recién visitar —después de 47 años— el pueblo de La Higuera en Bolivia, dónde murió el Che.
“¿Qué significa ser el hermano del Che?”, se pregunta el mismo Guevara. “Yo he llegado a la conclusión y lo he dicho porque yo he sido militante desde muy joven, desde muy chico en los años sesenta en que la Revolución cubana marcara un antes y un después en Latinoamérica. Para mí Ernesto es mi hermano, es mi hermano de sangre. Y el Che es mi compañero de ideas”, explicó a CNN.
Y en ese ir y venir, Juan Martín nos invita a conocer la intimidad de esa hermandad.
“Yo miro al Che como el me miraba a mí. Me imagino lo que le pasaba por su cabeza ante un chico 15 años menor”, dice Juan Martín, a quien el Che lo había bautizado con un diminutivo Patatín.
Como el Che llegó a ser el Che
Según Juan Martín, para entender al Che Guevara hay que comprender a su familia y el contexto de Argentina de los años sesenta.
“Nadie nace de un repollo. Tu ambiente, tu contexto, tu familia como eran tus padres de que manera se vivió, también el contexto nacional e internacional influían sobre todo en una familia en que estaban muy metida dentro de estas cuestiones de lo que pasaba en el mundo (…) Cuando yo hablo de la locura de mi viejo, yo digo que la mejor combinación la sacó Ernesto en el sentido de los sueños de mi viejo que siempre los tenía pero no los cumplía y con mi vieja, quien tenía disciplina y cumplía”.
Ante la pregunta de si el Che empezó a tener ideas revolucionarias tras su viaje en motocicleta —como es popularmente conocido—, Juan Martín aceptó la idea pero sorprendió con que la formación comenzó en su casa con las diferentes influencias a las que todos estaban expuestos, tanto por los libros que leían como las ideas que llegaban de sus familiares.
De los libros dijo Juan Martín: “En casa podía faltar cualquier cosa menos libros. Y no eran libros para tener en la biblioteca todos acomodados, eran libros para leer e incluso vos te ponías a leer un libro y estaba marcado que daba mucha rabia porque estaba pensando eso de quien lo había marcado discutiendo —en vez que con el autor— porque lo habían marcado”.
En cuanto a como el Che había formado sus ideales de justicia, el hermano explica:
“En mi casa era imposible que se destratara o maltratara a alguien, muchísimo menos que se maltratara por su situación social. Al contrario, si alguien estaba en una dificultad lo lógico era que se ayudara. Es decir la solidaridad y estar al lado de la gente era una cosa que nos inculcaron desde el vamos. Esto es algo que te va predisponiendo. Está además la formación de leer, y de leer de todo. En casa yo tenía un tío que era peronista, mi viejo era antiperonista. Había un tío que estaba en la revolución, el la guerra civil española, una tía que era más comunista que él (Ernesto). Teníamos parientes que eran curas, monjas, militares, marinos. Era de todo. Entonces vos tenias información de todo eso. No era que vos estabas en una familia cerrada y que tu formación venía de un solo lado, y además se discutía. Vos escuchabas, escuchabas lo que decía uno y lo que decía el otro. En aquella época no había internet o Wikipedia pero sí había enciclopedias y diccionarios, entonces muchas veces vos ibas a averiguar, investigar. Te obligaban a eso, a tener tu propio pensamiento, a no aceptar de buenas o primeras lo que te dijeron”.
Según cuenta Juan Martín, la educación era central para la familia y todos tenían que pasar por el “filtro del estudio”, sostiene, argumentando que a la misma vez su padre era muy firme. “Vos no podías ser perdedor. Aquello de esa frase tengo grabada. Venías a protestar por algo y te decían: ‘Mi hijo a llorar a la iglesia, acá no’”.
“Entonces era esa cosa, por un lado arréglatela, por otro lado te doy la educación, por otro lado tenés tu manera de pensar. Este conjunto de cosas yo creo nos han formado a todos y constituyeron lo que después fue el Che”, dice Juan Martín Guevara.
Durante la entrevista con CNN, Juan Martín insistió que ha decidido que se conozca la versión del Che desde el punto de vista de la familia porque “hay que recuperar el hombre y el pensamiento”.
Juan Martín Guevara ha encarado este viaje de recuerdos, mientras que los otros hermanos —Celia y Roberto— han preferido no hablar con los medios.
¿Responderle al exagente de la CIA?
Ante la pregunta de si quería responder a las declaraciones de Félix Rodríguez, quien estuvo a cargo del operativo que terminó con la vida de su hermano y quien ha confesado que tiene bajo su posesión el reloj del Che, Juan Martín dice que no le gusta hablar de él, pero agrega:
“El Che es universal. Entonces las cosas que pertenecen al Che no pertenecen a una familia. Yo no voy a estar pidiéndole a Félix Rodríguez me dé un reloj. Ni pensaría que los hijos Che estén pidiendo el reloj de su padre. Yo creo que lo que el Che ha brindado al mundo es muchísimo más que un reloj. Félix Rodríguez puede guardarlo en el bolsillo izquierdo o en el bolsillo derecho y punto, y no me gusta hablar de Félix Rodríguez porque es un empleado de la CIA. El sabrá quién le manda y por qué le manda y qué debe decir y qué no debe decir y qué debe hacer con el reloj. No es mi problema. Tal vez algún día —no sé si lo tendrá o no— puede tener un problema de conciencia con el reloj y tirarlo, regarlo o devolverlo. Pero no es un problema para mí, como tampoco es un problema que se comercialice o mercantilice la camiseta o todo esto porque este es el mundo. Hoy se comercializan los órganos, se comercializan los niños”, dice Juan Martín.
Para Patatín, como lo llamaba el Che, contar la historia desde la mirada familiar en el libro es el primer paso para recuperar la identidad de Ernesto Guevara de la Serna. “Uno puedo estar a favor o en contra de lo que representó”, agrega Juan Martín, pero se puede discutir y debatir a través de las ideas, concluye.
Escucha la entrevista completa para conocer como le gustaba tomar el mate al Che y cómo se lo preparaba su hermano Juan Martín.