(CNN) —- El primer ministro de Australia dijo este sábado que “tiene gran confianza” en que las señales detectadas en el océano Índico son de al menos una de la dos cajas negras del avión desaparecido de Malasia, pero predijo que encontrar los restos será una “tarea ingente”.
“Es probable que continúe por largo tiempo”, dijo el primer ministro Tony Abbott a periodistas en Beijing, donde se encontraba en una visita diplomática. Los funcionarios chinos apreciaron la “transparencia y la franqueza” en la búsqueda del vuelo 370 de Malaysia Airlines, dijo, “creo que es debido a nuestro país que nos hemos aproximado de esta forma”.
A más de 35 días de que el avión desapareció de los radares el 8 de marzo durante un vuelo de Kuala Lumpur, Malasia, a Beijing, la búsqueda continúa.
Nueve aviones militares, uno civil y 14 naves asistirían la búsqueda este sábado, informó el Centro Conjunto de la Agencia de Coordinación australiana. El centro del área de la búsqueda se encuentra a unos 2,330 kilómetros al noroeste de Perth.
El comandante de la Marina de Estados Unidos que lidera al equipo estadounidense que busca al vuelo 370 dijo sentirse “optimista” sobre cómo avanza la tarea. Los cuatro sonidos detectados en los días recientes fueron continuos y consistentes con los que una caja negra emitiría, dijo el comandante William Marks.
“Hemos descartado que sea algo natural, o de un barco comercial o algo así”, dijo, “estoy de acuero con el primer ministro… estamos optimistas”, agregó.
Las familias se mantienen escépticas
Familiares de las 239 personas en la aeronave se reunieron este viernes con Malaysia Airlines y funcionarios del gobierno de Malasia.
La madre de Pouria Nourmohammadi, un adolescente iraní que usó un pasaporte falso para abordar el avión, dijo no estar impresionada. “Siento que el gobierno de Malasia se ha olvidado del MH370”, dijo a CNN este sábado.
“Estos días no está en las noticias, solo dicen, seguimos buscando”.
El sábado, investigadores a bordo del barco australiano Ocean Shield planeaban continuar la búsqueda con un localizador ping —un detector de señales submarinas— mientras el agua se mantenía en calma. Buscan nuevas señales de alguno o ambos de los localizadores que estaban adheridos a la grabadora de voz de la cabina o al registrador de datos de vuelo, dijo Marks.
Entre más señales localicen, los investigadores pueden reducir más la zona de búsqueda. “Tenemos que aferrarnos al localizador ping un poco más para asegurar que hemos agotado todo el poder de la batería de las cajas negras”, dijo. Las baterías estaban certificadas para durar 30 días, pero la compañía manufacturera predijo que durarían más tiempo.
Una vez que los investigadores concluyan que ya no hay esperanza de que las baterías sigan funcionando, los investigadores sumergirán el Blufin-21, un sonar, para explorar el piso del océano.
Cuatro sonidos
El 5 de abril, el localizador ping detectó dos pulsos submarinos en una frecuencia cercana a la usada por el localizador. Tres días después, el pasado martes, se recibieron las señales dos veces más.
Las cuatro señales estaban a unos 27,35 kilómetros de cada una.
Rastrear los sonidos es solo un primer paso en la búsqueda de las grabaciones del avión, la carcasa y a las personas a bordo.
Ralph Ellis, David Molko, Elizabeth Joseph, Ivy Sam y Chan Kok Leong contribuyeron con este reporte.