El candidato presidencial republicano Donald Trump responde a una pregunta hecha por Jorge Ramos, presentador de Univisión y Fusión, durante una conferencia de prensa antes del evento de su campaña en el Grand River Center el 25 de agosto del 2015 en Dubuque, Iowa.

(CNNMoney) – La cadena en español más vista en Estados Unidos aún no puede obtener una credencial de prensa para los eventos de campaña de Donald Trump.

El jueves, un vocero de Univisión le dijo a CNNMoney que a los reporteros de la cadena les siguen negando las credenciales por la campaña de Trump, casi dos semanas después de que hubiera un enfrentamiento entre las dos partes.

Una portavoz Trump reiteró la opinión de la campaña de que hasta que se resuelva la demanda del candidato por 500 millones de dólares contra Univisión, la concesión de credenciales a los reporteros de la cadena equivale a un “conflicto de intereses”.

La campaña invocó por primera vez este razonamiento el 23 de octubre, cuando los equipos de noticias de Univisión trataron de asistir a un mitin de la campaña de Trump en Florida. Las solicitudes de credenciales fueron rechazadas.

Los rechazos de la campaña han continuado, lo que a veces obliga a Univisión a obtener videos de los mítines de Trump de otros medios de noticias.

Trump ha tenido una relación tensa con la prensa a lo largo de su candidatura a la nominación presidencial republicana, y repetidamente ha atacado a los periodistas sobre lo que él considera un trato injusto. A otros dos medios, el Huffington Post y el Des Moines Register, igualmente se les han negado las credenciales para los eventos de Trump.

Pero la decisión de rechazar a Univisión es notable puesto que representa una fusión de los intereses de la campaña y los intereses empresariales de Trump.

Univisión vetó Miss Universo

La Organización Miss Universo generó 3,4 millones de dólares en ingresos para Trump en el 2014.

Su demanda contra Univisión fue motivada por la decisión que la cadena tomó en el verano de dejar de transmitir el certamen de Miss Universo, que en aquella época era propiedad de Trump.

Univisión decidió no transmitir el certamen después de que Trump hiciera comentarios despectivos sobre los inmigrantes mexicanos durante su evento de lanzamiento de la campaña el 16 de junio.

La tensión entre las dos partes continuó en agosto, cuando Jorge Ramos, de Univisión, el presentador de noticias en español más popular en Estados Unidos, fuera expulsado de una conferencia de prensa de Trump en Iowa.

A Ramos finalmente le permitieron regresar a la sala de prensa, donde él y Trump tuvieron un largo intercambio sobre la inmigración.

La pelea con Univisión es solo una parte de la complicada relación de Trump con la comunidad hispana. Grupos hispanos se han molestado por el hecho de que ha sido elegido para presentar “Saturday Night Live” este fin de semana, y le han enviado cartas y peticiones a NBC para que revoque la invitación. El jueves, un grupo llamado DeportRacism.com ofreció una “recompensa” de 5.000 dólares a cualquier persona que interrumpa su participación mientras el espectáculo está en el aire.

La campaña de Trump no está rechazando a todos los medios de comunicación en español. Un portavoz de Telemundo, la segunda cadena más importante en español, confirmó que sus reporteros han recibido credenciales para todos los eventos de Trump que ha solicitado.

En una conferencia de prensa anteriormente esta semana para promover su nuevo libro, “Crippled America”, Trump habló cariñosamente sobre Telemundo cuando llamó a un reportero de la cadena.

“Por cierto, me gusta Telemundo”, le dijo Trump al reportero. “Me gusta más que Univisión. Estoy demandando a Univisión por 500 millones de dólares”.