(CNN) – Donald Trump triunfó a lo grande el Supermartes, pero Chris Christie casi le robó el espectáculo a Trump en el evento de la noche de elecciones.
El gobernador de Nueva Jersey, quien apoyó el viernes a Trump, presentó al magnate de bienes raíces durante una conferencia de prensa del Supermartes. Pero cuando Trump comenzó a hablar, la gente no podía dejar de hablar de la expresión del rostro de Christie.
“‘Chris Christie’ se está volviendo una tendencia a nivel nacional en este momento”, escribió Zeke Miller en Twitter.
“Al parecer Chris Christie está cuestionando todas sus opciones de vida. #Supermartes”, escribió Gabbie Stasson en la red social.
Las cosas no han sido nada fáciles para Christie desde que respaldó a Trump la semana pasada. Segundos después de que Christie terminará de declarar su apoyo, Trump le ordenó que se “subiera al avión y se fuera a casa”, un intercambio incómodo que fue captado en cámara y se extendió rápidamente por Internet.
Luego, el domingo, Trump vaciló cuando se le preguntó en CNN si rechazó el apoyo de la supremacía blanca, como por ejemplo al exlíder del Ku Klux Klan, David Duke.
“Ni siquiera sé de qué están hablando con la supremacía blanca o los supremacistas blancos”, le dijo Trump a Jake Tapper de CNN. “Así que no sé. No lo sé… ¿me apoya, o que está pasando? Porque no sé nada sobre David Duke; no sé nada sobre los supremacistas blancos”.
Trump, quien posteriormente le atribuyó el incidente a un auricular defectuoso, señaló una conferencia de prensa del viernes en la que rechazó a Duke y reiteró que él no quería el apoyo de los supremacistas blancos. Christie se negó a responder preguntas sobre la extraña respuesta de Trump, al decirles a los reporteros en una conferencia de prensa el lunes que era algo “fuera de lugar”.
Esta semana, las cosas empeoraron para Christie. El martes, seis periódicos de Nueva Jersey se unieron en un esfuerzo para pedirle a Christie que renunciara a la gobernación del estado.
“Qué vergüenza. Es una absoluta vergüenza”, escribieron los periódicos en una editorial conjunta. “Por el bien del estado, es hora que Christie les haga un favor a sus electores que han sido abandonados desde hace mucho tiempo y renuncie como gobernador. Si se niega, los ciudadanos deberían iniciar una campaña de destitución”.