(CNN) – La familia de Philando Castile, quien fue asesinado el año pasado por un policía de San Antonio, Minnesota, llegó a un acuerdo de 3 millones con la ciudad, según un comunicado de la ciudad y abogados de la familia.
Jeronimo Yanez, quien dejará el cuerpo policial, fue absuelto el 16 de junio de homicidio en segundo grado y dos cargos de descarga intencional de un arma de fuego que pone en peligro la seguridad. Castile fue asesinado el 6 de julio durante una parada de tráfico, y su novia transmitió las consecuencias del tiroteo en Facebook Live.
“La muerte de Philando Castile es una tragedia para su familia y para nuestra comunidad”, dijo el comunicado. “Las partes se movieron con prontitud para resolver posibles demandas civiles resultantes de esta tragedia para permitir que el proceso de curación avanzara para la familia Castile, para el pueblo de San Antonio y para todos los afectados por la muerte de Philando Castile en Estados Unidos”.
“Ninguna cantidad de dinero podría reemplazar a Philando. Con la resolución de las reclamaciones civiles, la familia continuará lidiando con su pérdida a través del importante trabajo de la Fundación de Ayuda Philando Castile”.
El anuncio se produce una semana después de que la familia de Michael Brown, quien fue baleado y asesinado en 2014 por un agente de la policía en Ferguson, Missouri, llegó a un acuerdo en su demanda contra la ciudad por la muerte del joven.
Brown, que era negro, fue asesinado por el entonces oficial Darren Wilson, que es blanco. El incidente provocó indignación y protesta en todo el país. Una investigación por el Departamento de Justicia sobre el incidente no provocó ninguna acusación contra Wilson, quien argumentó que le disparó a Brown en defensa propia pues Brown lo enfrentó.
Los detalles de ese acuerdo económico no fueron hechos públicos, aunque el pleito original muestra que la familia de Brown buscó daños punitivos y compensatorios por más de 75.000 dólares, además de los honorarios de abogados.
La muerte de Castile se produjo un día después de la muerte a manos de la policía de Alton Sterling en Baton Rouge, Luisiana, algo que fue capturado en parte por videos de peatones y provocó protestas generalizadas.