(CNN) – El exasesor de Seguridad Nacional de Donald Trump, Michael Flynn, podría ser el primer acusado en la investigación del fiscal especial para la trama rusa, Robert Mueller, en recibir su condena y salir de la corte sin ir a prisión.
Aún así, sería una de las personas con más alto perfil condenados hasta el momento por la investigación de Mueller.
Flynn, que se desempeñó como asesor de Seguridad Nacional del presidente Donald Trump durante menos de un mes al comienzo del gobierno, se declaró culpable hace un año de mentirles a investigadores federales. Desde entonces, ha colaborado ampliamente con Mueller y al menos con otra unidad del Departamento de Justicia en las investigaciones en curso. Esa cooperación llevó a otros “testigos directos de primera mano a colaborar con (Mueller)”, dijeron los fiscales.
La dura prueba de Flynn le ha dado a Mueller un testigo clave en algunos de los momentos más escudriñados durante la campaña de Trump, la transición y el primer mes en la Casa Blanca, convirtiendo al exteniente general en una causa política respaldada por conservadores recelosos del acercamiento de Mueller.
Trump mismo deseó a Flynn “buena suerte” en un tuit de este martes por la mañana, y agregó que “será interesante ver lo que tiene que decir”.
A pesar de las confesiones de Flynn de que mintió sobre tres cosas —incluidas las solicitudes de políticas que formuló al entonces embajador ruso Sergey Kislyak durante la transición—, el equipo de Mueller ha pedido al juez que sentencie a Flynn al mínimo tiempo o incluso no enviarlo a la cárcel. Flynn probablemente enfrenta entre cero y seis meses de prisión, y su sentencia será decidida únicamente por el juez federal Emmet Sullivan, que ha supervisado su caso.
La audiencia de sentencia de Flynn comienza a las 11 a.m. ET.
Tres acusados anteriores en la investigación de Mueller —el ex abogado personal de Trump, Michael Cohen; el abogado holandés Alex van der Zwaan, y el ex asesor de campaña de Trump, George Papadopoulos— se declararon culpables del mismo delito de mentir. Cada uno recibió sentencias que incluían un tiempo en prisión. Pero ninguno de esos hombres ayudó a los investigadores de forma tan amplia, voluntaria o sincera como Flynn, dijo el equipo de Mueller.
Otro acusado, el exagente de la campaña de Trump, Rick Gates, también se declaró culpable de una acusación falsa en la investigación de Mueller. Continúa cooperando con la investigación y no tiene fecha de sentencia establecida.
La sentencia de Flynn ha sido opacada en las últimas tres semanas por críticas a las acciones del FBI cuando el buró se le acercó en la Casa Blanca por primera vez el 24 de enero de 2017.
El equipo de defensa de Flynn planteó por primera vez el tema en un memorando al juez la semana pasada. Los abogados defensores argumentaron que a Flynn no se le debería enviar a la cárcel porque mintió en circunstancias diferentes a las de van der Zwaan y Papadopoulos, que habían sido advertidos de que podían ser procesados por mentir al FBI.
Flynn habló con los agentes del FBI sin la presencia de un abogado y no se les advirtió de las posibles consecuencias legales. Tampoco involucró a la oficina del abogado de la Casa Blanca, y el FBI no involucró al Departamento de Justicia en su entrevista.
Flynn estaba tan relajado, según los investigadores, que no tenían la impresión de que estuviera mintiendo durante la entrevista, según las notas de los agentes. Aun así, el FBI sabía que cuando Flynn dijo que no había pedido ciertas respuestas del embajador Kislyak a las sanciones estadounidenses contra Rusia o una resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, estaba mintiendo.
Otra nota del FBI sobre la entrevista del 24 de enero de 2017, publicada el lunes por la noche, confirmaba que Flynn negó equivocadamente haber intentado influir en la reacción del gobierno ruso a las sanciones y las intenciones de la ONU.
Flynn conoció a Kislyak en 2013 mientras era director de la Agencia de Inteligencia de Defensa, y desde entonces ha desarrollado la relación con el gobierno ruso. Los documentos judiciales publicados el año pasado muestran que los miembros del equipo de transición de Trump conocían las solicitudes de Flynn al embajador un mes antes de la inauguración.