(CNN Español) – La contaminación ambiental tiene en alerta a la Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM), donde se han registrado en los últimos días niveles altos de contaminación por el humo de los incendios y la contaminación.
La Comisión Ambiental de la Megalópolis dice que la emergencia ambiental se da debido a la presencia de partículas PM2.5, PM10 y Ozono, que generan afectaciones a la salud.
¿Qué son las partículas contaminantes?
La materia particulada, o contaminación de partículas, es la mezcla de gotitas sólidas y líquidas que flotan en el aire, según la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos. Pueden ser PM2.5, PM10 y de ozono.
La contaminación por partículas proviene de plantas de carbón y de gas natural. Automóviles, agricultura, caminos sin pavimentar, sitios de construcción e incendios forestales también contaminan y crean esas partículas y la cantidad de estas en el aire se mide a través del índice de Calidad del Aire.
Ese índice se calcula utilizando niveles de cinco contaminantes: ozono a nivel del suelo, contaminación de partículas, monóxido de carbono, dióxido de azufre y dióxido de nitrógeno. La escala varía de 1 a 500, con puntuaciones superiores a 150 consideradas poco saludables para todos y puntuaciones superiores a 300 clasificadas como peligrosas, con una probabilidad de afectar a poblaciones enteras.
La Fase 1 del Plan de Contingencia Ambiental en la Ciudad de México se activa cuando se superan los 150 puntos de partículas finas (PM10 y PM2,5) del índice de Calidad del Aire.
Las PM pueden venir en forma de suciedad, polvo, hollín o humo. Y por estos días, la ZMVM ha registrado una gran cantidad de incendios, que mezclados con la sequía, las altas temperaturas y la baja velocidad de los vientos, ha disminuido la dispersión de agentes contaminantes en el aire.
Las PM2.5, o partículas finas, son la materia particulada más pequeña. Tanto así que mide 1/20 del ancho de un cabello humano, así que no puedes verlas, y pueden atravesar las defensas habituales de tu cuerpo. Estas partículas finas se producen a partir de todo tipo de combustión, incluidos vehículos motorizados, centrales eléctricas, quemas residenciales de madera, incendios forestales, quemas agrícolas y algunos procesos industriales.
Las PM10 son también llamadas “Partículas de Polvo Grueso” y tienen un diámetro de 2,5 a 10 micrómetros. Estas partículas provienen, entre otros, de operaciones de trituración o trituración y polvo levantado por los vehículos en las carreteras, según la Agencia de Protección Ambiental de Estaos, EPA.
Entre tanto el ozono a nivel del sueño (O3), que no debe confundirse con la capa de ozono en la atmósfera superior de la Tierra, “es uno de los principales componentes de la niebla tóxica”, según la la Organización Mundial para la Salud, OMS.
El O3 “se forma por la reacción con la luz solar (fotoquímica) de contaminantes como los óxidos de nitrógeno procedentes de las emisiones de vehículos o la industria y los compuestos orgánicos volátiles emitidos por los vehículos, los disolventes y la industria”, dice la OMS. Los niveles de ozono más elevados se registran durante los períodos de tiempo soleado.
¿Cómo afecta tu salud?
Debido a su diminuto e imperceptible tamaño, las partículas pueden entrar y alojarse en tus pulmones e incluso atravesar la barrera pulmonar y entrar en el sistema sanguíneo.
La exposición crónica a partículas contribuye al riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares y respiratorias, así como cáncer de pulmón, según OMS.
“Las partículas ultrafinas son las más peligrosas para tu salud, ya que entran al sistema respiratorio y a los alveolos, donde se lleva a cabo el intercambio gaseoso con la sangre”, dice un documento del gobierno de la Ciudad de México.
Respirar continuamente estas partículas hace que puedas desarrollar síntomas como tos, resequedad, irritación. También reducir la función pulmonar y agravar enfermedades respiratorias y cardiovasculares.
Investigaciones recientes han demostrado que la contaminación del aire es un problema de salud grave. Un estudio publicado el miércoles mostró que la contaminación del aire acortará la esperanza de vida de los niños en un promedio de 20 meses. La exposición prolongada también afecta nuestra capacidad de pensar con claridad, lo que reduce los puntajes en las pruebas verbales y matemáticas, según demuestran los estudios. Puede aumentar el riesgo de demencia.
¿Cómo protegerse de la contaminación por partículas?
Las autoridades ambientales de México aconsejan que grupos susceptibles como niños, mujeres embarazadas, adultos mayores y personas con problemas respiratorios reduzcan el tiempo de exposición al aire libre.
También recomiendan que deportistas cambien las actividades que requieren gran esfuerzo físico por otras de menor esfuerzo, que reduzcan el tiempo de actividad física y no se ejerciten cerca de vías de tránsito intenso.
Y la población general debe limitar el tiempo de exposición al aire libre y evitar fumar.
Entre las recomendaciones para mejorar la calidad del aire libre están:
- Reducir el uso del auto y compartir los viajes
- Usar el transporte público
- No utilizar fuegos artificiales ni hacer fogatas
- Hacer un uso eficiente de la electricidad y desconectar los aparatos electrónicos que no estén en uso
- Usar preferiblemente equipos solares en casa
- Reciclar