(CNN) – El gobierno Trump y los demócratas de la Cámara de Representantes acordaron en principio financiar al gobierno después de fin de mes, pero no parecen estar cerca de llegar a un acuerdo sobre un estímulo adicional para el coronavirus.
Hablando el domingo, el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, dijo que él y el presidente Donald Trump continúan presionando por un paquete más estrecho de lo que exige la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.
“Donde estamos realmente estancados es en ciertos temas de política, pero lo más importante es en la línea superior”, dijo Mnuchin en Fox News Sunday, haciendo referencia a la suma total de un proyecto de ley de estímulo.
“Hagamos ahora un proyecto de ley más específico”, prosiguió, y dijo que los republicanos planeaban avanzar en ese paquete a finales de esta semana. “Si necesitamos hacer más en 30 días, continuaremos haciendo más. Pero no retengamos a los trabajadores y empresas estadounidenses”.
Los comentarios de Mnuchin se producen en medio de conversaciones de estímulo estancadas entre los principales líderes del Congreso y funcionarios de la Casa Blanca. Las negociaciones entre Pelosi, el líder de la minoría del Senado, Chuck Schumer, y los principales funcionarios de la Casa Blanca fracasaron hace casi un mes y aún no han progresado mucho desde entonces.
Los demócratas están presionando por una propuesta de varios billones de dólares con fondos para escuelas, subsidios para el alquiler, proveedores de servicios de salud y pequeñas empresas. Mientras tanto, el liderazgo republicano del Senado ha estado trabajando durante semanas entre bastidores para construir un consenso interno sobre una propuesta reducida o “estrecha” que incluiría fondos para educación, pequeñas empresas, un beneficio federal de desempleo mejorado y reducido y protecciones de responsabilidad.
La discusión continua ha llevado a una visión cada vez más pesimista de si es posible otro paquete de ayuda en el Capitolio, siguiendo a la Ley CARES de US$ 2,2 billones aprobada en marzo.
Cuando se le preguntó por qué Trump no ha invitado a Pelosi y a Schumer a la Oficina Oval para conversar, Mnuchin objetó.
“El presidente constantemente tiene no solo a su equipo económico en la Oficina Oval, sino que ahora Mark Meadows y yo hemos estado hablando por teléfono con Mitch McConnell y los republicanos del Senado todos los días”, dijo. “Cualquier legislación requiere el apoyo de ambos partidos”.
Mnuchin y Meadows, el jefe de gabinete de la Casa Blanca, han rechazado repetidamente la línea superior demócrata y han presionado para mover un paquete a menor escala que consiste principalmente en áreas donde existe al menos un acuerdo bipartidista de primera línea. Pelosi y Schumer se han negado, castigando a los republicanos por subestimar la magnitud de la necesidad creada por la peor pandemia en un siglo.
Durante una entrevista el domingo en “AM Joy” de MSNBC, Pelosi culpó a los republicanos y al gobierno de Trump por la falta de acción en un proyecto de ley de estímulo. “No estamos haciendo nada. Ahora, ¿podríamos haber salvado a todas esas personas? No a todas, sino a muchas. La cantidad de personas que han sido infectadas ha crecido por millones”, dijo Pelosi, y agregó que una Comisión de la Cámara tomará acción esta semana sobre un proyecto de ley y luego votará.
“Tenemos que asegurarnos de que el público sepa cómo podemos resolver esto y por qué la administración se interpone en el camino para aplastar el virus”, dijo.
Las negociaciones estancadas no parecen extenderse al financiamiento del gobierno, que vence a fines de septiembre. Mnuchin dijo que él y Pelosi acordaron presentar una resolución esta semana que financiaría al gobierno, aunque los detalles específicos aún no se han resuelto.
“No nos hemos puesto de acuerdo sobre los detalles específicos, pero mi expectativa es que sea hasta principios de diciembre”, dijo. “Ninguno quiere ver un cierre del gobierno”.
El contenido de la medida provisional de financiación del gobierno, conocida como resolución continua, y su duración siguen siendo el tema de discusión entre la administración Trump y los demócratas.
Mnuchin predijo que la tasa de desempleo estaría en niveles prepandémicos a principios de 2021, si el presidente gana un segundo mandato.
“El presidente lo va a bajar al 3% o 4% donde estaba antes de todo esto a principios del próximo año cuando sea reelegido”, dijo.
Pero el mercado laboral de Estados Unidos permanece en un agujero profundo durante la pandemia en curso, y la recuperación está perdiendo algo de su impulso.
Los empleadores estadounidenses agregaron 1,4 millones de empleos en agosto, una desaceleración en el crecimiento del empleo desde principios de este verano—, los empleadores agregaron 1,7 millones de empleos revisados en julio y 4,8 millones de empleos en junio. La tasa de desempleo cayó al 8,4% desde el 10,2% de julio, lo que marca la primera vez que la tasa de desempleo cae por debajo del 10% desde marzo.
Estados Unidos sigue con una pérdida de 11,5 millones de empleos desde febrero, y millones de familias necesitan beneficios para llegar a fin de mes mientras el Congreso continúa discutiendo sobre el próximo proyecto de ley de estímulo.
Mnuchin prometió que el presidente tomaría medidas para abordar la creciente deuda nacional si resultaba victorioso en noviembre.
“Creo que si el exvicepresidente fuera elegido tendría políticas económicas socialistas que sacarían la deuda de control”, dijo sobre el candidato demócrata Joe Biden. Sin embargo, la deuda ha continuado expandiéndose bajo el mandato de Trump, incluso después de su recorte de impuestos de 2017 que agregó alrededor de US$ 1,5 billones a la deuda.
Se proyecta que la deuda de Estados Unidos superará el tamaño de la economía de todo el país el próximo año, la primera vez que la deuda federal podría ser mayor que el producto interno bruto de Estados Unidos desde 1946, dijo la Oficina de Presupuesto del Congreso.
“No hay duda en un segundo mandato, una vez que la economía esté de regreso, nos enfocaremos en este tema”, dijo Mnuchin.